En conferencia de prensa, la titular precisó en cuanto al incremento de las lluvias y la preparación sobre posibles problemas por anegamiento o inundación de cultivos, además de desabasto ante algún derrumbe en las vías.
Esta situación –subrayó- es algo que va a ser recurrente y por eso, paralelo a las recomendaciones de corto plazo, también vamos a empezar a emitir unas para adaptación y mitigación de los efectos de la temporada.
Entre los suelos susceptibles a inundaciones, la funcionaria remarcó aquellos dedicados al maíz, frijol, hortalizas, banano, plátano, caña de azúcar y pastos.
Principalmente en los departamentos de Escuintla, Chiquimula, Retalhuleu, Jalapa, Izabal y Quetzaltenango, detalló desde el Palacio Nacional de la Cultura, sede del Gobierno.
Explicó que chequean el comportamiento de los ríos con tendencia a incrementar su cauce, sobre todo por el tema de inundaciones en los cultivos y la seguridad de los hatos ganaderos y de especies mayores y menores que puedan tener en esas áreas.
Entonces aquí nos aparecen los municipios de Livingston, departamento de Izabal, alguno de Retaluleu y Chiquimula, añadió Rivera, mientras refirió el seguimiento igualmente al oleaje en el Pacífico, por la responsabilidad con la pesca.
Sugirió al sector agrícola mantener un monitoreo constante de los cultivos, especialmente en zonas como las mencionadas que tienen mayor tendencia a la saturación de suelos.
Igualmente, habilitar y limpiar los canales de drenaje para evitar que se acumule el exceso de agua, suspender la aplicación de fertilizantes con este nivel de lluvias, y proteger los viveros y cultivos en la etapa inicial.
La ministra llamó al sector pecuario a garantizar las reservas de alimentos secos y agua, mover el de los animales sobre tarimas de preferencia, sin humedad, al tiempo de revisar los corrales y los establos vulnerables a lluvias.
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