Un bebé sufrió varias heridas punzantes en la espalda y su brazo derechos, que “probablemente le dejarán cicatrices permanentes”, tras el ataque de un perro de raza Cane Corso, también conocido como mastín italiano.
El hecho ocurrió el 2 de marzo en el condado de Staffordshire, Inglaterra, cuando Lucy Bamber paseaba a su mascota Hugo, de dos años, junto a su otro perro, un Staffordshire Bull de nueve años.
La mujer, que tiene 26 años y es maestra, cruzó la calle con sus dos mascotas al ver un gato en su camino, sin notar que en la entrada de una casa se encontraba un bebé afuera, el cual fue atacado por su perro Hugo.
“Hugo nunca había actuado así. No solo está arrepentida. Me dijo que está dispuesta a hacer todo lo que esté en su mano para evitar que esto vuelva a ocurrir”, aseguró April Lamai, abogada defensora de Bamber ante el Centro de Justicia de North Staffordshire.
Dueña de perro peligroso enfrenta cargos tras ataque a bebé
De acuerdo con el medio inglés Stoke Sentinel, Bamber —originaria de Priestley Drive, Longton— se declaró culpable de ser la dueña de un perro peligrosamente fuera del control.
“No se dio cuenta de la presencia del niño hasta que Hugo mordió a la víctima. Inmediatamente apartó al perro. Le sorprendió el comportamiento de Hugo”, relató Lamai.
La letrada aseguró que cuando Bamber saca a pasear a Hugo, “siempre lleva bozal” y “una correa corta”, con una chaqueta de “alta visibilidad” con la consigna “Necesito espacio”, para advertir sobre el animal.

Ahora, la mascota de Bamber “está recibiendo más adiestramiento de obediencia y recuperación”, explicó Lamai, y agregó que Bamber “ya no pasea a Hugo por esa calle”.
“Es una dueña honrada. Tuvo dos perros antes que Hugo y demostró que es una dueña responsable. El tribunal puede estar convencido de que Hugo no supone un peligro para el público”, remarcó.
El Tribunal impuso a Bamber una multa de 487 libras esterlinas ——655 dólares— más el pago de una indemnización de 300 libras —403 dólares— a la madre, junto con 85 libras —114 dólares— en concepto de costos y 197 libras —265 dólares— de recargo.
Además, consideraron que Hugo no constituye un peligro para la seguridad pública debido a que su comportamiento anterior fue un incidente aislado.
«Usted es una persona apta y adecuada para poseer este tipo particular de perro. Debe mantener a Hugo bajo control. Le imponemos las siguientes condiciones. Cuando esté fuera debe llevar una correa fija y un bozal. Esto durará toda la vida de Hugo. Si no las cumple, Hugo puede ser destruido”, le indicaron a Bamber.