El próximo jueves 26 de junio, el jefe de Gabinete de Ministros, Guillermo Francos, se presentará ante el Honorable Senado de la Nación para brindar su primer informe de gestión del año. En el marco del Informe N.º 143, responderá más de 900 preguntas formuladas por legisladores nacionales, entre las que se incluye un extenso bloque dedicado a la estrategia comercial internacional de la Argentina y su participación en misiones comerciales.
Las respuestas elaboradas por el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto permiten delinear las prioridades actuales del Ejecutivo en materia de promoción de exportaciones, atracción de inversiones y cooperación técnica en diversas regiones, con particular énfasis en el vínculo con Asia.
En este marco, la política exterior argentina ha orientado sus esfuerzos a consolidar relaciones bilaterales mediante mecanismos diplomáticos y comerciales, a la vez que ha promovido la participación en foros multilaterales como ASEAN y FOCALAE, para articular una inserción inteligente en cadenas de valor regionales y globales.
Objetivos y ejes de vinculación económica con Asia
La estrategia hacia Asia contempla múltiples dimensiones. En primer lugar, se busca consolidar lazos políticos y económicos mediante visitas oficiales, negociaciones de acuerdos comerciales y el impulso de instancias de cooperación técnica.
Desde el plano económico, se prioriza la diversificación de exportaciones y la atracción de inversiones en sectores estratégicos como energía, agroindustria, biotecnología, servicios basados en el conocimiento y tecnología agrícola.
El énfasis en exportar valor agregado y tecnología se complementa con acciones de promoción como la participación en ferias comerciales, la firma de protocolos sanitarios, y el avance en acuerdos entre el Mercosur y países como Corea del Sur, Singapur e India. China, India, Japón y Vietnam figuran entre los socios más relevantes, mientras que países del Sudeste Asiático como Indonesia y Malasia han sido objeto de acciones orientadas a la apertura de mercados para carnes, frutas y cereales.
Otro punto relevante abordado por el Ejecutivo fue la eliminación del artículo 18 del Decreto 339/25, que promovía la certificación de calidad internacional para las pymes. Frente a las críticas sobre una posible pérdida de competitividad, el Gobierno argumentó que las nuevas condiciones macroeconómicas, la simplificación de trámites y la reducción de cargas impositivas han generado un entorno más favorable para las exportaciones.
Entre las medidas destacadas figuran la eliminación de retenciones para más de 4.400 productos industriales, la ampliación del régimen Exporta Simple para permitir operaciones desde aeropuertos regionales, y la apertura de nuevos mercados para productos agroindustriales y manufacturas.
Estas acciones buscan facilitar el acceso real a mercados externos, privilegiando la eficiencia operativa por sobre la imposición de normas formales que no lograron revertir la caída en la base exportadora pyme.
Diplomacia económica, federalismo y proyección tecnológica
El informe también detalla la estrategia federal de la política exterior, articulada a través del programa “La Cancillería en el interior del país” y del Consejo Federal de Relaciones Exteriores y Comercio Internacional. Estos espacios han permitido incorporar los intereses productivos provinciales y municipales en la agenda internacional, mediante misiones comerciales, hermanamientos institucionales y asesoramiento técnico.
Por último, se resalta el concepto de “techplomacia” como una dimensión prioritaria de la diplomacia económica argentina. La vinculación con multinacionales tecnológicas busca posicionar al país como hub regional de servicios, atrayendo inversiones en sectores como software, inteligencia artificial y servicios corporativos globales.
Programas como Argentina Delivers ejemplifican esta apuesta por el talento y la innovación como motor del crecimiento exportador y la inserción en cadenas de valor intensivas en conocimiento.
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