La Cámara Federal de Casación resolverá el 7 de julio si mantiene o no el límite de visitas impuesto por el TOF 2. La defensa reclama que no se restrinja su vida social mientras cumple arresto domiciliario.
El próximo lunes 7 de julio a las 12 horas, la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal definirá si la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner podrá recibir visitas sin restricciones en su departamento del barrio porteño de Constitución, donde cumple arresto domiciliario tras la condena en la causa Vialidad.
La defensa de la exmandataria, encabezada por el abogado Carlos Beraldi, presentó un recurso contra la decisión del Tribunal Oral Federal N° 2 (TOF 2), que había establecido un listado limitado de personas autorizadas a ingresar a su domicilio, entre ellas familiares directos, personal médico, legal y de custodia.
Más de 700 personas enviaron solicitudes por correo electrónico para visitar a la expresidenta, lo que obligó al TOF 2 a derivarlas a su equipo de defensa para su gestión. La defensa sostiene que la medida es inconstitucional porque limita arbitrariamente su vida social, y recordó que Cristina Kirchner es una figura pública con vínculos sociales y políticos amplios.
Los jueces Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Diego Barroetaveña deberán evaluar si sostienen el criterio restrictivo o habilitan un régimen más flexible. La decisión podría marcar un precedente sobre el alcance del arresto domiciliario en casos de exfuncionarios con alto perfil.
Cristina Kirchner fue condenada a seis años de prisión por administración fraudulenta en la obra pública. Aunque la sentencia no está firme, cumple prisión domiciliaria por razones de salud y edad, en su domicilio de San José 1111, en la Ciudad de Buenos Aires.
La defensa pidió que se habilite el ingreso de allegados, dirigentes y personas de confianza sin necesidad de autorización previa en cada caso, como sí ocurre actualmente.