Asunción, 1 jul (EFE).- El presidente de Paraguay, Santiago Peña, admitió este martes que a su país «todavía le falta mucho para llegar al lugar que -considera- está destinado a ocupar» y prometió que hará «mucho más» en su gestión de Gobierno, al presentar su informe anual ante el Congreso, en el que destacó, sin embargo, sus logros económicos y de política exterior.
En una sesión especial de ambas cámaras, en la que observaron algunas sillas vacías de legisladores de oposición, Peña se refirió a los resultados de los dos años del mandato que comenzó el 15 de agosto de 2023, en un discurso de poco más de una hora en el que salió al paso de las críticas a sus viajes al exterior, admitió los ‘desafíos’ en materia de salud y sacó pecho por programas sociales de alimentación escolar, pensión a adultos mayores y viviendas sociales.
«Yo soy el primero que confieso y digo fuerte y alto: no ha sido suficiente, tuve que hacer mucho más, y les prometo, voy a hacer mucho más», afirmó el mandatario, que arrancó algunos aplausos de los asistentes, en su mayoría correligionarios y funcionarios del Gobierno.
Mención a la prensa
Peña, que llegó acompañado por la primera dama, Leticia Ocampo, y su familia, resaltó la importancia de que el presidente acuda a «rendir en forma pública, abierta y transparente su informe de gestión al Congreso», poder que describió como «la verdadera caja de resonancia de la democracia».
No obstante, apuntó que en esta fecha, que consideró «se ha convertido en rutinaria en los últimos 33 años», los parlamentarios afines al presidente «celebran; los opositores lo critican; y la prensa titula, fatídica e infaliblemente: ‘El Presidente pintó un país de maravillas'».
«‘El Presidente pintó un país de maravillas’: no amigos, no vine a hacer esto. El Paraguay ya es un país maravilloso, pero todavía le falta mucho, muchísimo, para llegar al lugar que está destinado a ocupar», reconoció.
Entre otros logros, aseguró que su país disfruta del «único período democrático» de su historia, en alusión a la etapa que se inició en 1989 con la caída del régimen de Alfredo Stroessner, y dijo, que por lo tanto, rechaza el autoritarismo y la dictadura.
«No estamos ante el período más largo democrático de nuestra historia, como muchas veces se dice; estamos ante el único período democrático de nuestra historia», sentenció el gobernante, para quien los paraguayos dicen «fuerte y alto, autoritarismo y dictadura nunca más».
Política exterior
En sus palabras, defendió las más de 40 visitas internacionales que ha realizado desde que juró al cargo, como parte de la que llamó una «diplomacia activa».
«Cuando algunos critican estos viajes, cuando cuestionan esta diplomacia activa, podemos responder con resultados. Y les respondo: cada nuevo mercado abierto es empleo, es oportunidad, es futuro», señaló Peña, para quien «viajar para trabajar por el país no es alejarse de la gente» sino, «precisamente, acercar las oportunidades».
También hizo «un mea culpa» en materia de salud porque, según dijo, ha tenido «desafíos y también desilusiones», pero prometió saldar esa deuda, para lo cual anunció una inversión de al menos 500 millones de dólares en infraestructura hospitalaria, algo que, sostuvo, «ningún Gobierno» hizo antes.
Sobre la educación, resaltó la construcción de 17 escuelas modelos en cada uno de los departamentos del país, la compra de más de 328.000 pupitres nuevos con una inversión de 32 millones de dólares, la entrega de 6.796 becas y la capacitación técnica de 178.000 paraguayos para el mercado laboral.
Por otra parte, Peña, que es economista de profesión, dijo que los 36 años de democracia que vive Paraguay, «con todos sus vaivenes, han sido los de mayor crecimiento económico» de su historia.
«Esto no es un relato: es un dato», apuntó, al sentenciar que su país estima crecer un promedio de 4,4 % en el periodo 2023-2025, cuando en la región la misma previsión rondará el 2 %.
Reacciones
En declaraciones a periodistas, el titular del Congreso, el oficialista Basilio Núñez, calificó como «bastante mesurado» el informe presidencial y destacó «la presencia mayoritaria» de legisladores de las diferentes bancadas.
La diputada opositora Rocío Vallejo criticó, por su lado, que Peña hablo «de ese país de maravillas», pero «se olvidó de varios temas», entre ellos la negociación con Brasil del Anexo C del Tratado de la hidroeléctrica de Itaipú, la inseguridad en las calles o «la falta de medicamento en los hospitales».
(c) Agencia EFE