Netflix continúa sumando series ideales para ver de un tirón, y una de las que más comentarios generó en los últimos meses es Criminal: Alemania. Esta producción alemana propone un policial diferente: con solo tres capítulos logra mantener al espectador en vilo, sin necesidad de grandes escenas de acción ni persecuciones impactantes.
La clave de Criminal: Alemania está en su estructura minimalista y su intensidad narrativa. Toda la historia transcurre dentro de una sala de interrogatorios, donde los investigadores enfrentan a distintos sospechosos. Cada episodio presenta un caso autoconclusivo que se resuelve en el mismo día. La tensión radica en las miradas, los silencios y los pequeños gestos, construyendo un suspenso constante que atrapa sin necesidad de cambiar de escenario.
La serie forma parte de una antología mayor llamada Criminal, que incluye versiones ambientadas en España, Francia y Reino Unido. Cada país ofrece tres capítulos independientes, unidos por el mismo concepto: un juego psicológico entre la ley y quienes están al borde de ella. Sin embargo, la entrega alemana fue una de las más elogiadas por su guion sólido y su capacidad para generar climas asfixiantes solo con palabras y gestos.

Según la sinopsis oficial de Netflix: “Cuatro paredes. Investigadores y sospechosos cara a cara. La verdad está muy cerca, a veces al filo de la ley, y los interrogadores la pueden oler”. Y esa descripción resume a la perfección la experiencia de Criminal: Alemania, donde no hay persecuciones ni disparos, pero sí un enfrentamiento constante que se siente como un verdadero ajedrez verbal.
La crítica destacó especialmente el nivel actoral y la puesta en escena, que transforma el encierro físico en un terreno lleno de tensión, dramatismo y estrategias ocultas. Desde Clarín la describieron como “un juego de ajedrez en el que cada movimiento puede cambiar el destino de los personajes”, y señalaron que es un ejemplo de narrativa eficaz con recursos limitados.

Si buscás una serie compacta, que comience y termine en pocas horas pero deje huella, Criminal: Alemania es ideal. Con solo tres episodios y una duración breve, propone un viaje intenso al interior de la mente humana, los dilemas morales y los límites de la verdad.
Disponible en Netflix, esta ficción demuestra que el suspenso y el drama no siempre necesitan grandes presupuestos ni efectos, sino diálogos precisos, actuaciones convincentes y un guion que no subestime al espectador. Una opción perfecta para quienes aman los policiales psicológicos con un toque europeo que los diferencia de otras producciones.