Indicó que fue un pico del 25% en el consumo de gas, respecto a lo que habitualmente sucede para esta época.
Agregó que, normalmente, se toma la decisión de postergar otros consumos como los industriales o los de las centrales térmicas de electricidad, que no se paran, sino que se ponen a funcionar a gas oil, para priorizar el de los domicilios.
Como eso no sucedió en tiempo y forma, las cañerías se quedaron sin gas, bajó la presión y, por seguridad, se cortó el suministro.
Kessler explicó que si la decisión de cortar el suministro a industrias hubiese llegado antes, capaz que no se quedaban sin gas los domicilios, aunque es contrafáctico, sostuvo.
De todas maneras, expresó que, como país, tenemos que tener una planificación porque este tipo de eventos meteorológicos van a suceder con más asiduidad.
Por último, manifestó que es el Estado el que debe velar por el interés común de la población y, por ende, el que debe tomar las decisiones en el sistema energético.
Consideró como una idea correspondiente a un “soñador” la de dejar a los vientos del mercado la planificación energética del país.
Son los gobiernos, dijo, los que tienen que tomar las medidas y la organización de los sectores necesarios para el bien de la sociedad.
Fuente: Radio Olavarría