Jorge Aulicino, una de las voces más influyentes de la poesía argentina contemporánea y figura destacada del periodismo cultural, falleció a los 75 años. Su trayectoria atravesó más de cinco décadas de escritura, edición y traducción, con una obra que dejó una huella en el campo literario hispanoamericano.
Camina la materia
antes que la energía de cada uno.
Una especie de estado intermedio
entre lo sólido y el gas.
Lo estrictamente humano es un vacío
en donde atruena el río.Jorge Aulicino (11 de agosto de 1949-21 de julio de 2025). Qué día más triste, Bonturo. pic.twitter.com/gDmDCm43bH
— Danixa 🧠❤️ (@danixa) July 21, 2025
Nacido en Buenos Aires en 1949, Aulicino inició su carrera periodística en los años setenta. Trabajó en medios como La Calle y La Tarde, y más tarde se incorporó a la redacción de Clarín, donde desarrolló una extensa labor como editor en las páginas de Cultura, Arte y Ciencia y editor jefe de Espectáculos.
Fue uno de los impulsores y columnistas principales de la Revista Ñ, su subdirector y columnista así como del suplemento cultural del diario, hasta el año 2012. También dirigió la revista política Generación 83 y colaboró en Diario de poesía, una publicación clave para la renovación de la escena poética argentina en los años ochenta y noventa.

Jorge Aulicino fue, ante todo, un poeta de una voz singular y reconocible. Su obra poética, caracterizada por la precisión del lenguaje y una profunda reflexión sobre lo cotidiano, la memoria y la historia, lo posicionó como una figura clave de su generación.
Entre sus títulos más reconocidos se encuentran Paisajes y figuras (1981), La poesía de la ciencia (1985), El río de la Plata (1994) y Cierta esperanza (2014), entre muchos otros. Sus versos, a menudo cargados de ironía y una mirada aguda sobre la condición humana, exploraron los límites del lenguaje y la capacidad de la poesía para nombrar lo inefable.
Murió Jorge Aulicino, pero vivirá por siempre en su grandiosa traducción de «La Divina Comedia», que no debería faltar en ningún hogar hispanohablante. QEPD.
— Juan Pablo Csipka (@jpcsipka) July 21, 2025
En una entrevista con Clarín, Aulicino reflexionó sobre el valor de la poesía: «Reivindico la poesía como suceso colectivo. En los finales de la dictadura, organizamos, con el fallecido Daniel Chirom, Poesía Abierta, entendiendo que las lecturas tenían valor político. Ahora, lo siguen teniendo, en otro contexto: recuerdan que la poesía es también comunicación, pensamiento, un hecho de humanidad».
Y si se le preguntaba por el rol de la poesía, la respuesta concetraba toda su lucidez e ironía: «Creo que la poesía hay que leerla con la convicción de que no aporta nada y no resuelve nada. Después de años en que se preguntó por la “función” de la poesía, creo que esa es su función: que nos entreguemos a ella sin esperar otra recompensa que no sea la de leerla».
El periodista de Clarín
La labor periodística de Jorge Aulicino fue prolífica, especialmente en el diario Clarín, donde desarrolló una parte fundamental de su carrera. Durante décadas, Aulicino se desempeñó en diversas secciones, dejando su impronta en la cobertura cultural y de actualidad. Su estilo se caracterizaba por una capacidad singular para desentrañar la complejidad de los hechos.

En Clarín, Aulicino fue una figura central en la sección de Cultura, donde sus notas, reseñas y entrevistas se convirtieron en referencia para lectores y colegas. Su aguda mirada crítica y su profundo conocimiento de la producción simbólica que cada momento histórico lega a las próximas generaciones lo hicieron un editor respetado. Quienes trabajaron con él recuerdan su cordialidad y su ética profesional. En 2017 recibió el Diploma al Mérito Konex en la categoría de Periodismo Literario.
Además, su trabajo como traductor fue igualmente valorado: en 2011 publicó una versión del Infierno de Dante Alighieri y, en 2015, completó la traducción de la Divina Comedia, trabajos que se suman a sus versiones de Pier Paolo Pasolini, Guido Cavalcanti y John Keats, entre otros.
Dominaba varias lenguas y su trabajo como traductor de poesía, especialmente del italiano y el inglés, fue reconocido. Entre sus traducciones más importantes se encuentran obras de autores como Eugenio Montale, Giuseppe Ungaretti y T.S. Eliot, entre otros.
Dolor por la muerte de Jorge Aulicino. Acá hablando de La divina comedia en #Los7locos. https://t.co/OH3pDuYZLk
— Cristina Mucci (@Cristina_Mucci) July 21, 2025
Su labor como traductor no se limitó a una mera transposición de palabras, sino que implicó una profunda inmersión en la cultura y el espíritu de cada obra. Aulicino entendía que traducir era también interpretar y recrear, buscando siempre la resonancia justa en el idioma de llegada.
En una entrevista, Aulicino respondió a la pregunta ¿qué es una buena traducción?: «Es la que tiene mayor calidad literaria sin alejarse demasiado del diccionario. Es decir, manteniéndose fiel al texto en todo lo posible».
«Con la partida de Jorge Aulicino, la Argentina pierde a uno de sus escritores más lúcidos y comprometidos con la identidad del lenguaje poético y las nuevas generaciones de escritores», lo despidió la Biblioteca Nacional esta tarde. En un comunicado, lo definieron como: «Trabajador incansable, buen conversador, afable y también irónico, fue un gran difusor de la literatura nacional contemporánea, un buceador en las aguas de la poesía que siempre mostró a los demás los tesoros que iba encontrando. La Biblioteca Nacional lamenta su partida y acompaña a sus familiares y amigos en la despedida»
Jorge Aulicino será despedido esta tarde desde las 18 en la sala velatoria Cochería Tacuarí (Tacuarí 466).