El diputado nacional Rogelio Iparraguirre confirmó su candidatura como primer concejal por Fuerza Patria en Tandil, una decisión que marca su regreso a la política local y que, según aseguró, no estaba en sus planes a comienzos de año. «En el verano, no me lo imaginaba. En ese momento, preferí dedicarme de lleno al trabajo en la Cámara. Hace muy poco tiempo, conversando con el equipo de Tandil, entendimos que el momento es especial y requería decisiones importantes», explicó a Radio Voz (FM 106.9).
La postulación se da en un contexto de transición política en Tandil, donde Miguel Lunghi ya buscaría un nuevo mandato. Para Iparraguirre, esto representa el fin de un ciclo: «Estamos asistiendo al final de un proceso político histórico de un cuarto de siglo, el lunghismo. No es solo por el término de su sexto mandato, sino por la pérdida de reacción y la imposibilidad de contagiar a su equipo. Somos parte de una generación que tiene la obligación de empezar a pensar en el Tandil post lunghista de los próximos 30 años».
Con esa mirada, el dirigente del peronismo tandilense renunció a una eventual candidatura nacional para volver a pisar fuerte en el territorio. «Es volver a Tandil, que es la Primera A. Esta ciudad está para las grandes ligas», afirmó.
También planteó que la coyuntura nacional influye en su decisión: «Estamos viviendo la Argentina de Milei. Hay una cantidad de emprendedores que no saben qué hacer con su producción, el docente vilipendiado, los jubilados cobrando peor que nunca, el campo con rentabilidad negativa. Milei es anti Tandil», sostuvo, y agregó que «por todo esto, había una cuestión de responsabilidad en estar acá. El Concejo Deliberante es un lugar que me apasionó siempre».
Consultado sobre la posible nacionalización de la campaña local, apuntó directamente contra Gonzalo Santamarina, candidato de La Libertad Avanza: «Me gustaría que diera explicaciones de las cosas nacionales en las que tiene absoluta responsabilidad. Fue funcionario varias veces. En el macrismo estuvo en el Ministerio de Trabajo y los que se llevaron la peor parte fueron los trabajadores. Ahora, con Milei, les va mal a muchos, pero peor a los jubilados, y Santamarina está en el ANSES. Va a tener que poner la cara por Milei».
Iparraguirre también defendió el accionar del peronismo en el Concejo, donde su espacio evitó trabar el presupuesto del Ejecutivo local. «Después de un par de décadas, Lunghi no tiene mayoría automática en el Concejo. Cuando llegó el momento del presupuesto, nosotros nos sentamos a construir acuerdo, de hecho bajamos las tasas que proponían. Pero dejar al gobierno municipal sin presupuesto es prenderlo fuego. Otros, con tal de conseguir tres votos más, se negaron a negociar. Nosotros somos otra cosa, vinimos a cuidar a Tandil».
Reconoció que el peronismo también debe hacer autocrítica. «Venimos de una experiencia fallida de un gobierno nacional en el que fui parte, me hago cargo como lo hice siempre. No hizo más que prolongar un deterioro sostenido. Venimos de un proceso de 11 años de deterioro progresivo del ingreso, eso detona cualquier cabeza», señaló. Y fue más allá al analizar el ascenso de Javier Milei: «También hubo un deterioro de la estatalidad, que hizo fuerte a Milei. Aparece un loquito vestido de Batman y rompe una maqueta del Banco Central, dice las barbaridades más impensadas, y lo que era una feta de salame o el recorte de Clemente en 2001, hoy puso un presidente. Así y todo, es una evolución: prefiero que pongan un ser humano».
En esa línea, resaltó el valor que los tandilenses le otorgan al rol del Estado. «Hay candidatos libertarios que dicen que el Estado tiene que desaparecer. Por ahí no conocen mucho Tandil. Sabemos que esta ciudad tiene cosas que cuidar. Hay que mejorarla, prepararse para lograr un Estado inteligente y eficiente, afrontar desafíos que fueron barridos debajo de la alfombra, que tienen que ver con la integración. Tandil está fragmentado», advirtió.
Sobre el bajo nivel de participación electoral en los últimos comicios, Iparraguirre convocó a la ciudadanía a no resignarse: «Ya hubo seis elecciones en lo que va del año y en todas se registró la participación más baja. Si estás caliente, poné una foto del Diego o el sobre vacío. Pero hacé uso de ese derecho que te asiste. Es cuando valemos todos lo mismo. En nuestro caso particular, hacerlo pensando en Tandil. Pongamos en valor la Fuerza de Tandil».
Finalmente, expresó su deseo de ser parte activa del nuevo ciclo político que se avecina. «Es un contexto histórico transicional, entre el lunghismo que va a terminar cumpliendo un cuarto de siglo y lo que viene después, de lo cual me siento orgullosamente parte. ¿Qué rol tendré en ese Tandil que viene? El que mis vecinos me asignen, que puede ser conducir los destinos de la ciudad o ninguno. Estoy en este momento con un acumulado de experiencia, fuerza, decisión, capacidad, equipo y madurez, que me hace poder decir que represento para mis vecinos y vecinas la mejor opción para defender Tandil».