Bajo el sol de agosto, con las paredes recién pintadas y el sonido de guitarras de fondo, el Distrito Cultural Dino Saluzzi reabrió sus puertas y lo hizo a lo grande: música en vivo, break dance, arte joven y la presencia de los salteños que se acercaron a celebrar la recuperación de uno de los edificios más emblemáticos del casco urbano.
Ubicado en avenida Independencia 910, el histórico predio que alguna vez albergó al matadero municipal mutó en lo que promete ser uno de los polos culturales más activos de la ciudad. Y esa transformación se notó desde el primer minuto: familias enteras, artistas emergentes, food trucks con aromas tentadores y una energía colectiva que invitaba a quedarse.
“Este es un espacio para todos los artistas, de cualquier estilo. Acá hay lugar para el folklore, para el rock, el pop, el rap y todo lo que Salta tiene para mostrar”, dijo Ito.r uno de los músicos entrevistados durante la jornada inaugural.
«Es un paso enorme para cualquier banda emergente»
La emoción era compartida. Entre los primeros en pisar el escenario del renovado Dino estuvo la banda Jelly Foster. Con los nervios propios del debut, contaron que era la primera vez que tocaban en vivo: “Fue liberador. Estar acá, con público, en un lugar que nos abre las puertas, es un paso enorme para cualquier banda emergente”. No fueron los únicos. Durante la tarde también sonaron los acordes de Encuadra, Lucho Perdiguero, Chiara Aciar, Magnesio, Agara, Sekka y otros proyectos locales que encontraron en este espacio una plataforma para mostrarse.
El intendente Emiliano Durand también recorrió el lugar y dialogó con vecinos y medios. “Este es el distrito cultural de la ciudad. Un espacio abierto para todos los que quieran expresarse. Recuperamos un edificio histórico y lo pusimos en valor con una inversión que apunta al desarrollo cultural y social de los salteños”, afirmó. En paralelo, detalló que se respetaron materiales y colores originales del inmueble, se reacondicionaron las instalaciones y se habilitaron nuevos sectores como camarines, sala de ensayo y espacios al aire libre para actividades escénicas.
Pero más allá de la infraestructura, lo que brilló fue la gente; la emoción de los músicos al bajarse del escenario; las mamás que acompañaron a sus hijos; los aplausos espontáneos al terminar una canción; los abrazos y contacto entre artistas, es sin dudas algo invaluable para la cultura local.
“Me pareció hermoso. Vine con mi mamá porque lo vimos en redes y queríamos conocer. Es un espacio súper lindo para pasar la tarde y ver talento salteño”, dijo Florencia, una de las visitantes. Olga, su madre, fue más allá: “Estos chicos necesitan un lugar para expresarse. Esto es necesario y es lindo ver tanta juventud reunida”.
Durante todo el fin de semana, el Dino Saluzzi ofrecerá propuestas para todos los gustos. El sábado fue el turno de la música alternativa; el domingo desde las 12 hasta las 16, la fiesta continúa con una gran peña folclórica que incluirá a referentes como Samuel García, Florencia Causarano, Kishkas, La Yapa, Los Potrillos, De La Cruz y Marcela Ceballos.
