De acuerdo con un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) difundido este domingo, en estas vacaciones de invierno viajaron 4,3 millones de turistas, un 10,9% menos que el año pasado. En total, se estima que el turismo dejó un impacto económico de $1,5 billones (unos 1.163 millones de dólares) en los distintos destinos del país.
El informe revela que la estadía promedio en el receso escolar bajó a 3,9 días, por debajo de los 4,1 días registrados en 2024 y mucho menos que los 4,5 días de 2023. Este recorte responde, principalmente, a la caída del consumo: quienes viajaron, buscaron gastar menos.
Otro dato clave es que el gasto diario por persona promedió los $89.236, lo que representa un 4,8% más que el año pasado en términos reales (ajustados por inflación), pero el movimiento general fue menor y eso se reflejó en las cifras finales.
De acuerdo con CAME, estas vacaciones de invierno se vieron afectadas por varios factores: el deterioro del poder adquisitivo familiar, el mal clima -más frío y lluvioso que lo habitual- y una menor presencia de turistas internacionales debido a un tipo de cambio menos favorable para el país.
“La situación económica y la pérdida de competitividad cambiaria se sintieron fuerte. Hubo muchos turistas que eligieron destinos internacionales, algo que ya se venía viendo desde el Hot Sale de mayo, cuando más de la mitad de las ventas fueron para el exterior”, destaca el informe.
También el INDEC viene señalando esta tendencia: los viajes internacionales crecieron 67% en el primer cuatrimestre de este año.
El informe de CAME menciona que en la provincia de Buenos Aires la ocupación estuvo por debajo de lo esperado, tanto en la costa como en el interior, y que destinos serranos como Tandil o rurales como Chascomús tuvieron mejores niveles de demanda.
En conclusión, en comparación con 2023, este año viajaron un 21,5% menos de turistas y la estadía promedio también bajó. Aunque el gasto por persona subió levemente, no alcanzó para compensar la caída en volumen.
Cambio de hábitos
El informe también destaca que el turista nacional cambió sus prioridades. Muchos eligieron viajar pocos días, buscando promociones, opciones más económicas o actividades gratuitas. Museos, ferias, funciones de teatro sin costo y propuestas culturales fueron la alternativa para abaratar salidas en un contexto de bolsillos ajustados.
Otro fenómeno que se consolidó fue el del “viajero de último momento”: personas que deciden sus vacaciones sobre la marcha, priorizando flexibilidad, clima y precios de ocasión. Según CAME, esta tendencia se profundizó notablemente en 2025.
Además, el clima jugó un papel clave. Las búsquedas en internet relacionadas con el estado del tiempo en distintos destinos del país —como “dónde está nevando” o “clima en Bariloche hoy”— escalaron posiciones durante julio, confirmando que el clima fue uno de los factores determinantes a la hora de planificar una escapada.