En un contexto marcado por el frío intenso, lluvias y hasta nevadas en distintas regiones del país, muchas familias argentinas se enfrentan al invierno sin acceso a gas natural ni a sistemas de calefacción seguros. Ante esta realidad, un grupo de investigadores desarrolló una alternativa innovadora que combina funcionalidad, seguridad y bajo costo.
El proyecto, impulsado por científicos del CONICET en la ciudad de Mar del Plata, nació en 2018 como respuesta a una necesidad urgente en barrios con infraestructura precaria. El resultado fue una estufa social pensada especialmente para hogares vulnerables: robusta, económica y capaz de brindar una solución efectiva durante los meses más fríos del año.
Fabricada con hierro y ladrillos, esta estufa utiliza leña como combustible y tiene un diseño compacto que le permite no solo calefaccionar ambientes sino también servir como cocina. Esta doble funcionalidad la convierte en un recurso indispensable para muchas familias que no solo buscan calor, sino también una manera de preparar sus alimentos de forma segura.
Jeremías Ispizua, ingeniero e investigador del CONICET, remarcó el impacto positivo de esta iniciativa: “El uso de esta estufa mejora la calidad de vida de las familias”. Su testimonio pone de relieve cómo una solución tecnológica puede generar un cambio profundo en comunidades que muchas veces quedan al margen de las políticas energéticas tradicionales.
En cuanto a su costo, la estufa demanda una inversión de aproximadamente $180.000 en materiales. Si se incluyen el traslado y la instalación, el monto total puede llegar a $220.000. No obstante, el proyecto se sostiene gracias a donaciones y a la colaboración voluntaria de las familias beneficiadas, quienes realizan aportes que oscilan entre $5.000 y $30.000.
Esta iniciativa, que ya genera repercusión por su impacto social, representa una herramienta concreta para miles de personas que enfrentan el invierno en condiciones adversas. No se trata solo de una estufa, sino de una propuesta que aporta calor, dignidad y una mejora real en la calidad de vida.