Cinco mandatarios buscan ser aliados críticos en el Congreso y reclaman fondos, coparticipación y obras públicas.
Cinco gobernadores dieron un paso clave en la política nacional al conformar el frente Provincias Unidas, con el objetivo de competir en las elecciones del 26 de octubre y convertirse en un actor central en la relación con el Gobierno de Javier Milei.
Los mandatarios Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz) encabezan esta nueva alianza que se presenta como garante de la gobernabilidad, pero sin renunciar a marcar límites al oficialismo cuando lo consideren necesario.
Un equilibrio delicado en el Congreso
El plan es conformar bloques propios en Diputados y el Senado, integrados por legisladores provinciales que puedan respaldar proyectos clave del Ejecutivo, aunque también ejercer presión en temas sensibles como la coparticipación federal y la obra pública.
Con esta estrategia, el frente busca posicionarse fuera de la grieta entre el kirchnerismo y La Libertad Avanza, apostando a captar el voto de sectores que reclaman acuerdos más amplios.
La disputa por los recursos
Uno de los principales conflictos con el Gobierno se originó en el recorte de fondos coparticipables y el freno de las obras de infraestructura. Durante su primer año de gestión, Milei aplicó el ajuste con la llamada “motosierra”, reduciendo las transferencias y usando los fondos discrecionales como herramienta de negociación política.
Aunque logró aprobar la Ley Bases y blindar varios vetos presidenciales, no pudo frenar la judicialización de los reclamos por las cajas previsionales.
Sin embargo, en 2025 se registra una mejora. Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), en julio los Recursos de Origen Nacional crecieron un 11,2% interanual, mientras que la coparticipación federal aumentó un 8,1%, con Buenos Aires liderando el repunte y Santa Cruz mostrando el menor crecimiento.
Lo que se juega en octubre
Los gobernadores impulsan además la coparticipación del Impuesto a los Combustibles Líquidos y cambios en las transferencias de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), una iniciativa que ya obtuvo media sanción en el Senado.
El futuro de Provincias Unidas dependerá en gran medida del resultado de las elecciones de octubre, que definirá si Milei deberá tratarlos como aliados críticos o como una oposición dura en el Congreso.