Una familia de Concepción del Uruguay vivió momentos de extrema tensión cuando una bebé de apenas un mes de vida comenzó a ahogarse. Afortunadamente, una agente de la Policía Federal la asistió con extrema rapidez, le realizó primeros auxilios y le salvó la vida.
El hecho se registró en una casa ubicada en San Martín al 500, en aquella ciudad de la provincia de Entre Ríos, y quien dio la alerta solicitando a los gritos de ayuda fue la abuela de la nena.
Tras escuchar ese desesperado pedido, agentes que se encontraban de guardia en la División Unidad Operativa Federal (DUOF) Concepción del Uruguay de la PFA, ubicada a poco más de 100 metros de la vivienda, acudieron de inmediato.
Al llegar, observaron que la bebé sufría una avanzada condición de ahogo y que presentaba un intenso color morado y que los padres de la criatura, naturalmente, estaban en estado de shock y no reaccionaban.
Ante ese panorama, quien se puso al frente de la urgencia fue la agente Giselle Lemos, quien tomó a la nena entre sus brazos y le practicó la maniobra de Heimlich para lactantes, un procedimiento de primeros auxilios utilizado para tratar el atasco de las vías respiratorias superiores.
Como la ambulancia que solicitaron no llegaba, los policías acompañaron a la familia hasta el hospital Justo José de Urquiza para que le efectúen a la bebé los estudios correspondientes después de atravesar esa situación.
Luego de las evaluaciones correspondientes, los médicos diagnosticaron a la nena con “broncoaspiración por obstrucción láctea o mucosa recuperada” y más tarde le dieron el alta médica.
Antes de retirarse del hospital, la familia completa se fotografió junto al personal médico y policial que los acompañaba. Más tarde, ya con más calma, los padres se acercaron a la delegación de la Policía Federal para agradecerle a la agente Lemos por su milagrosa intervención.
ES
