Este miércoles, horas después de que la Justicia condenara a Claudio Contardi —exmarido de Julieta Prandi— a 19 años de prisión por abuso sexual con acceso carnal reiterado, violencia psicológica y amenazas, Emanuel Ortega rompió el silencio. El cantante, pareja de la modelo y conductora desde hace cinco años, publicó un extenso y contundente descargo en sus historias de Instagram dirigido a Nicolás Márquez, escritor y biógrafo del presidente Javier Milei, quien había hecho un comentario cuestionando y poniendo en duda el testimonio de Prandi.

La sentencia contra Contardi marcó un antes y un después en una causa que conmocionó a la opinión pública. Sin embargo, la reacción de Márquez en sus redes sociales sumó tensión al clima. En su cuenta de Instagram, el escritor compartió una captura vinculada a la noticia y escribió duras palabras.
“Julieta Prandi: no me agrada la farándula ni los escándalos de los ‘mediáticos’, pero el tema caló tan alto que es imposible no enterarse. No conozco ni tengo referencias personales de la actriz en cuestión y mucho menos conozco quien ha sido el exmarido de ella, hoy judicialmente contra las cuerdas. Pero sinceramente me cuesta creer que una mujer mediática, mayor de edad, que 25 años atrás hacía una sátira con Francella en torno a una relación de tinte pedófila, con autonomía económica, notoriedad pública y vínculos sobrados, haya vivido ‘secuestrada’ y abusada sexualmente durante años por su propio marido«, indicó.
«Cualquier mujer con dos dedos de frente y cierto nivel cultural, al ser golpeada o abusada por su esposo se separa en el acto y hace la denuncia pertinente: ¿Cómo hizo para vivir por años bajo ‘secuestro’ sin escaparse? ¿cómo se prueba qué fue ‘abusada’ sino es por testimonios de sus amigos o de su actual pareja —un tal Emanuel Ortega que bien podría declarar por celos contra su pareja anterior—?», añadió Márquez.
Y cerró: «Sospecho mucho de las denuncias tardías de suyo improbables, solo sustentadas en el apoyo del lobby de actores, de los amigos de la denunciante y de la actual pareja de la persona supuestamente dañada, de los cuales ni uno solo fue ‘testigo’ presencial del ‘secuestro’ ni mucho menos de los abusos sexuales denunciados, y cuya única prueba es el testimonio de la persona que dice haber padecido tal cosa. Conclusión: NO ME CIERRA NADA”.

Las palabras de Márquez generaron indignación inmediata entre los seguidores de Prandi y, sobre todo, en su pareja. Emanuel Ortega decidió responder de manera directa y sin medias tintas, apuntando tanto a la postura del escritor como a su historial personal.
En su publicación, el músico escribió: “MENSAJE PARA ‘UN TAL’ @nicolasmarqueznoriega: No voy a detenerme en las denuncias que usted tiene de abusos contra su hija, o violencia contra su ex esposa. De eso ojalá se encargue la Justicia. Pero al leer sus reflexiones alarmantemente retrógradas, machistas y por demás repugnantes, que no hacen otra cosa que dejar en evidencia su enanismo intelectual, lo primero que me genera es lástima. Lo segundo (y pido disculpas de antemano por el exabrupto) es ganas de cagarlo bien a trompadas».
Y sumó, visiblemente furioso: «No solo por meterse con mi pareja, sino por meterse con una víctima de las peores aberraciones que una mujer pueda soportar de manos de un ‘hombre’, que por lo visto bien podría haber sido usted. Lo invito a que se llame a silencio. Y si decide no hacerlo, lo invito a que lo próximo que tenga para decir me lo diga en la cara».
«La vida nos da una y otra vez la posibilidad de elegir. La próxima vez que elija abrir la boca, piénselo un poco mejor. Y si no le da para pensar mejor, simplemente no diga nada”, concluyó Emanuel.

El posteo de Ortega, cargado de indignación y dolor, se viralizó rápidamente y recibió el respaldo de miles de usuarios, incluidos colegas y referentes del espectáculo. Muchos aplaudieron la frontalidad de su respuesta, interpretándola como un gesto de apoyo incondicional hacia Prandi en un momento clave.
Una fallo histórico
La causa contra Claudio Contardi había comenzado varios años atrás, cuando Prandi denunció haber sido víctima de abusos sexuales reiterados y privación ilegítima de la libertad durante su matrimonio. El fallo condenatorio, que le impuso 19 años de prisión, fue celebrado por organizaciones y colectivos que luchan contra la violencia de género, quienes destacaron el valor de la conductora para sostener la denuncia en el tiempo a pesar de las críticas y la exposición mediática.
En este contexto, las palabras de Márquez no solo fueron interpretadas como una agresión directa a Prandi, sino también como un ejemplo del escepticismo y los prejuicios que aún persisten en torno a las víctimas de violencia. Ortega, fiel a su estilo reservado en lo mediático, decidió romper esa discreción para ponerle voz a su enojo y marcar un límite claro.