Vecinos de los barrios porteños de Belgrano y Las Cañitas reportaron una serie de muertes de mascotas en circunstancias similares: tres perros fallecieron en menos de una semana, mientras que al menos diez más presentaron síntomas graves de intoxicación tras haber ingerido sustancias sospechosas en la vía pública.
El episodio inicial involucró a Román, un perro que se descompensó mientras era paseado por la calle Arce, convulsionó, expulsó espuma por la boca y murió en minutos.
La abogada Cecilia Domínguez relató el caso de Alma y Hannah, sus dos perritas que sufrieron convulsiones, vómitos y temblores tras ingerir algo durante un paseo, aunque lograron recuperarse luego de atención veterinaria.
Ante los hechos, se abrió una investigación judicial bajo la órbita del fiscal Matías Hugo De Santis.Paralelamente, la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA) solicitó la colaboración de vecinos y comerciantes: piden que aporten datos, fotos o grabaciones que puedan ayudar a identificar a los responsables.
Como medida preventiva, el Gobierno de la Ciudad desplegó operativos de higienización y sanitización en zonas claves, abarcando avenidas como Dorrego, Libertador, Lacroze, Arévalo, Huergo, entre otras arterias cercanas.
La comunidad vive en estado de alerta máxima: muchos evitan ciertas calles al pasear a sus mascotas y han difundido recomendaciones vía grupos de WhatsApp y redes sociales, advirtiendo sobre posibles zonas de riesgo.
Un vecino expresó su preocupación sobre el veneno utilizado —posiblemente rodenticida— y pidió que la justicia actúe con rapidez: “Es posible que hayan tirado veneno para ratas sin medir las consecuencias, pero eso lo dictaminará la Justicia”.