La Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad de la Aeronavegación (Atepsa) anunció un cronograma de paros parciales que comenzará el próximo viernes 22 de agosto y se extenderá hasta el sábado 30, tras el vencimiento de la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo.
Las medidas de fuerza se desarrollarán en cinco jornadas, en franjas de 3 a 6 horas diarias, afectando exclusivamente los despegues al suspenderse las autorizaciones y la gestión de planes de vuelo en esos periodos. La empresa EANA reconoció que el conflicto es de larga data y aseguró que realizó “propuestas concretas” que no lograron destrabar la negociación paritaria.
El gremio decidió avanzar con los paros tras múltiples audiencias sin avances y ante la falta de acuerdo sobre la pauta salarial, que el Gobierno había propuesto en torno al 1% mensual, alineada con el resto del sector público.
EANA aclaró que los vuelos sanitarios y los servicios de Búsqueda y Salvamento Aeronáutico (SAR) no se verán afectados, y que las aerolíneas podrán reprogramar los despegues impactados.
Con más de 1.200 vuelos semanales en el espacio aéreo argentino, la aplicación de esta medida podría generar importantes demoras y reprogramaciones, tanto en vuelos de cabotaje como internacionales, justo en plena temporada alta y con la recuperación del mercado interno.