El banco estadounidense redujo su estimación de 5,3% a 4,7% del PBI, citando desaceleración económica, volatilidad de tasas e incertidumbre electoral. Destacan, sin embargo, la recuperación de sectores como construcción, minería y comercio desde el segundo semestre de 2024.
El banco estadounidense J.P. Morgan publicó este viernes un nuevo informe en el que recortó su proyección de crecimiento de la economía argentina para 2025. Según el análisis, el Producto Bruto Interno (PBI) avanzaría un 4,7%, frente al 5,3% previsto anteriormente.
Entre los principales riesgos que identificó la entidad se encuentran la desaceleración económica registrada en el segundo trimestre de 2025, la volatilidad de las tasas de interés y la incertidumbre electoral, factores que podrían afectar el consumo interno, las exportaciones y la estabilidad macroeconómica.
El informe, no obstante, reconoció avances en el superávit fiscal y en la desaceleración de la inflación, proyectando un índice interanual del 26,8% para diciembre de 2025. En paralelo, destacó la recuperación de sectores como los servicios financieros, el comercio, la construcción y la minería desde el segundo semestre de 2024.
J.P. Morgan también evaluó la situación política y mencionó la difícil semana que atravesó el Gobierno en el Congreso, donde sufrió varias derrotas legislativas, aunque logró sostener el veto a la ley de jubilaciones. Para el banco, este hecho evitó un fuerte impacto fiscal, aunque las tensiones políticas siguen generando dudas en los mercados.
En cuanto a las cuentas públicas, la entidad estimó que el superávit primario anual alcanzará el 1,7% del PBI, mientras que el resultado financiero total cerrará en 0,4% del PBI en 2025. Sin embargo, advirtió que será clave normalizar las condiciones del mercado para garantizar la sostenibilidad fiscal y monetaria en el mediano plazo.