El debate sobre el huso horario en Argentina alcanzó un nuevo capítulo en la Cámara de Diputados, que otorgó media sanción al proyecto de ley presentado por Julio Cobos (UCR-Mendoza). Si la iniciativa prospera en el Senado, de manera oficial se establecerá UTC–4 durante la época invernal, con vistas a retomar el UTC–3 en verano.
Según la bióloga Lorena Franco, investigadora del Conicet en el Centro Atómico Bariloche, este cambio sería particularmente beneficioso para la Patagonia porque la actual hora oficial genera un desfasaje significativo con la hora solar. “Los días de verano amanecen demasiado temprano”, explicó Franco, lo que implica que muchas personas se levantan varias horas después del amanecer. Retrasar el reloj permitiría un mejor alineamiento entre el ciclo solar natural y la rutina diaria.
El desajuste circadiano también tendría repercusiones en la salud y el desempeño cognitivo. Estudios indican que un desajuste entre el reloj interno y el entorno ambiental puede afectar especialmente el rendimiento escolar en adolescentes.
Más allá del impacto biológico, el cambio de huso también implicaría un importante ahorro energético. Alinearse con la luz natural permitiría reducir la dependencia de iluminación artificial, sobre todo durante el invierno, cuando la demanda de electricidad y gas tiende a elevarse.
Especialistas como Patricia Agostino, del Conicet y directora del Laboratorio de Cronobiología de la Universidad Nacional de Quilmes, suman que desde el punto de vista geográfico y sanitario, el huso UTC–4 sería más apropiado para gran parte del territorio argentino. Además señaló que algunas zonas cordilleranas estarían desfasadas hasta dos horas de la hora solar, una diferencia que el cambio de huso permitiría corregir.
En un contexto regional, sincronizar los husos horarios con países limítrofes como Chile también cobra relevancia. Chile acaba de adelantar sus relojes en una hora para coincidir nuevamente con Argentina en el huso UTC–3, facilitando el cruce por pasos fronterizos patagónicos y mejorando el turismo, la comunicación y la logística regional.