El presidente Javier Milei cerró este miércoles la campaña bonaerense de La Libertad Avanza en Moreno, con un discurso en que realizó una encendida defensa de su hermana Karina Milei en medio del escándalo por los audios del presunto pago de sobornos en la ANDIS, al que definió como una «opereta», volvió a deslizar un supuesto intento de atentar contra su vida -previamente en una entrevista había dicho que la estrategia kirchnerista es intentar matarlo– y con insistencia llamó a votar la boleta libertaria en las elecciones del próximo domingo, bajo la consigna «Kirchnerismo, nunca más».
Tras las advertencias lanzadas por el gobernador Axel Kicillof sobre la falta de garantías para la seguridad del acto de LLA -el club Villa Ángela, en el barrio de Trujui en pleno Moreno-, un férreo operativo de seguridad, que incluyó a efectivos de la Federal, de la Bonaerense y de Gendarmería, se desplegó en el lugar.
En la previa del encuentro hubo algunas escaramuzas menores y cruces entre libertarios y militantes K, pero tras el mensaje del Presidente y en plena desconcentración se produjeron múltiples incidentes, que incluyeron pedradas, botellazos, corridas y hasta golpes de puño entre ambos bandos, que culminaron con varios detenidos y heridos, entre ellos un cronista de América TV.
La llegada de Milei y sus dirigentes a un municipio clave de la Primera sección se produjo en medio de cruces entre el Gobierno nacional y el provincial por el armado del operativo, una semana después de que el Presidente tuviera que ser evacuado de una caravana en Lomas de Zamora tras recibir pedradas.
Previsto con mucho tiempo, el acto en Moreno fue diferente. Desde temprano Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad, estuvo a cargo del operativo, con efectivos que se apostaron a la mañana en la zona y con la propia funcionaria llegando al lugar a las 16, casi cuatro horas antes que Milei.
En la cancha de fútbol 11 donde se realizó el encuentro unas 2.000 personas se ubicaron frente al escenario donde luego habló el Presidente. Estuvo lejos de ser un acto multitudinario, demostrando que a los libertarios les sigue costando pisar fuerte en suelo bonaerense, que domina el kirchnerismo, al menos en términos de convocatoria. La expectativa violeta es que eso no se confirme en las urnas el próximo domingo.
Apenas tres oradores hubo antes de que Milei hable: la candidata a intendenta libertaria de Moreno en 2023 Andrea Vera, el candidato de la Primera sección, Diego Valenzuela, y el de la Tercera, Alejandro Bondarenko.
Milei llegó a las 19.30 y, tras un ingreso en medio de la gente, como suele hacer, empezó su discurso a las 19.55. Atrás habían quedado algunos cruces en la Ruta 23, en la intersección de las calles del Libertador y Magallanes. Se subió al escenario y saludó a sus principales referentes, cerrando con su hermana Karina. Allí volvió a defenderla, en medio del escándalo de los audios que la involucra en el presunto cobro de coimas. Milei trató de «basuras y estiércol» a los dirigentes del kirchnerismo que «se metieron con mi hermana».
«Las operetas e injurias que vomitan desde los rincones más oscuros de la política todos los días», dijo en relación a los audios que involucran a la secretaria general de la Presidencia. Y sobre el kirchnerismo, apuntó: «Quieren socavar los valores morales. Lo hacen de forma grosera, hacen operaciones y se terminan cayendo».
«Te quieren volver un leproso social. Te quieren llevar al barro, porque ellos están sucios en el estiércoles y te sacan ventaja porque ya están ahí. Pero no lo lograrán. Todos tienen conciencia de las operetas sucias», sostuvo, y añadió otras menciones directas, sobre todo, por el episodio en Lomas de Zamora.
«En Lomas me tiraron un adoquín, podrían haber atacado a cualquiera, no les importa si se tiene que cargar la vida de cualquiera. No se olviden que el kirchnerismo inmundo se cargó la vida del fiscal Nisman», dijo Milei. Pareció de esa manera reforzar la advertencia que había lanzado en un reportaje con el periodista Louis Sarkozy y difundido este mismo miércoles: “La estrategia del kirchnerismo es destruir el plan económico, hacer manifestaciones violentas o intentar matarme”, había denunciado en la entrevista.
En el tenso acto en Moreno, Milei buscó en todo momento darle épica al discurso, recordando el slogan de «kirchnerismo, nunca más» y responsabilizando al peronismo bonaerense de la escalada de violencia en las últimas semanas.
Y allí hubo insistentes referencias para lo electoral, definiendo el comicio del domingo como decisivo porque «estamos en una situación de empate técnico». Les pidió el voto a los bonaerenses: «Este domingo, andá y votá». Siete veces repitió ese mismo pedido. Y recordó: “A los kirchneristas este escenario les aterra y están dispuestos a todo para inclinar la balanza en su favor en este último tramo».
«Operan con las peores calumnias para desmoralizar a la gente de bien. El día de la elección van a redoblar las prácticas mafiosas con tal de inclinar la cancha medio grado a su favor. Esto puede ser la diferencia entre ganar y perder”, sostuvo.
Sobre el final, profundizó: “Ahora que nos encontramos en el tramo final de una elección crucial, habiendo destruido durante años la provincia, ahora la apuesta del kirchnerismo es engañar al electorado. Ellos quieren hacer creer a los bonaerenses que estas elecciones son irrelevantes”.
