En el Valle de México, los temblores ocurren principalmente por dos razones: la actividad de fallas geológicas activas en la zona y la influencia de sismos originados en otras regiones, especialmente en la costa del Pacífico.
En el resto del país, se registran aproximadamente 90 micro y macro sismos anuales con magnitudes mayores a 4.0 grados en la escala de Richter, según registros del Servicio Sismológico Nacional (SSN) de la UNAM.
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¿Por qué en septiembre tiembla mucho en México?
La idea de que ‘en septiembre tiembla mucho en México‘ es muy común porque varios de los sismos más recordados del país ocurrieron en ese mes:
- 19 de septiembre de 1985 (CDMX, magnitud 8.1).
- 19 de septiembre de 2017 (Morelos-Puebla, magnitud 7.1).
- 7 de septiembre de 2017 (Oaxaca-Chiapas, magnitud 8.2).
- 19 de septiembre de 2022 (Michoacán, magnitud 7.7).
Esto ha generado la percepción de que septiembre ‘es el mes de los temblores’, pero en realidad no hay evidencia científica de que ese mes tenga mayor actividad sísmica que otros.
Los sismos no tienen temporada: a diferencia de huracanes o lluvias, los terremotos se producen por la liberación repentina de energía en las placas tectónicas, y esto puede ocurrir en cualquier momento del año.
Coincidencia estadística: el Servicio Sismológico Nacional (SSN) y la UNAM han explicado que la repetición de fechas en septiembre es una coincidencia, no un patrón geológico.
