Como principal sede desde su inicio, Malba Literatura recibirá al Festival Internacional de Literatura de Buenos Aires durante tres días, con una programación imperdible para todos los amantes de la literatura contemporánea.
¿Para qué se escribe y para qué se lee si no es para ser otro? Si hay una tendencia natural en la literatura —en quienes la leemos, en quienes la escriben— es la de viajar hacia otra cosa. Esa sola inclinación —que está en su raíz— justifica su existencia y quizás garantiza su resistencia a la extinción.
En la realidad cotidiana vive la realidad fantástica de la imaginación, el deseo, el delirio, los relatos. En una persona hay muchas personas. En un minuto hay muchos días. Y si ese milagro de sensibilidades expandidas sucede, es porque existen las literaturas. Lo otro, lo alterno —una persona, una idea, un lugar— es lo ajeno, lo desconocido, lo que puede asustar y fascinar, por partes iguales, lo que contrasta con lo que creemos que somos y siempre, queramos o no, nos constituye. Porque si hay un otro, una otra, es porque también construimos ladrillo a ladrillo un nosotros/nosotras que puede ser tan sólido como un castillo de cartas de prejuicios. Porque también sabemos que, a lo largo de su historia, la literatura como espacio de representación de creencias ha dejado vacíos, invisibilizadas zonas que preferimos no ver, palabras que preferimos no leer. Nuestras identidades son porque hay otros, y porque nosotros también somos “los otros”. La literatura tiene una potencia empática única para devolveros a estas preguntas básicas.
Este festival propone un viaje por lo insondable que hay en uno, por “lo otro” que se manifiesta en el mundo conocido y, también, por el vértigo que nos revela que esos – ángeles o demonios- que aparecen de manera sorpresiva en nuestro interior, somos y no somos nosotros. Pero sobre todo es un recorrido imaginado para que los lectores digan si la vida es o no es literatura y si ellos son ellos o son otros.