Netflix apostó fuerte y ganó. Con Día cero, una miniserie de apenas seis capítulos protagonizada por Robert De Niro, la plataforma logró combinar lo mejor del thriller político con una trama que atrapa desde el primer minuto. Estrenada recientemente, esta ficción se convirtió en uno de los contenidos más comentados por el público y sigue escalando en el ranking de las más vistas.
En esta historia cargada de conspiraciones, el actor interpreta a George Mullen, un expresidente de Estados Unidos que vuelve a la escena pública tras un retiro anticipado. ¿El motivo? Un poderoso ciberataque que pone en riesgo la seguridad nacional y lo obliga a enfrentarse a una red oculta de mentiras, traiciones y manipulaciones a gran escala.
El rol clave de Robert De Niro y un elenco de lujo
Con una trayectoria que abarca desde clásicos del cine hasta éxitos recientes, De Niro vuelve a demostrar por qué es uno de los grandes nombres de la industria. Su interpretación de Mullen fue señalada como uno de los puntos más fuertes de la serie, gracias a una construcción precisa del personaje: un líder marcado por la responsabilidad y por las heridas del poder.
Lo acompaña un elenco de figuras consagradas y en ascenso: Jesse Plemons, Lizzy Caplan, Connie Britton y Angela Bassett, entre otros. Todos ellos aportan capas de complejidad a una historia que no se detiene nunca y que propone un recorrido intenso por los pasillos del poder, la manipulación mediática y las consecuencias de las decisiones tomadas a puertas cerradas.
De qué trata «Día cero»
Según adelanta la sinopsis oficial: “Un expresidente de EE. UU. debe volver de su retiro para encontrar la fuente de un mortal ciberataque, solo para descubrir una vasta red de mentiras y conspiraciones”. Con esa premisa, la serie introduce al espectador en una narrativa vertiginosa, donde cada capítulo deja un nuevo interrogante y nada es lo que parece.
Aunque por momentos la historia parece tan real que muchos se preguntaron si estaba basada en hechos verídicos, Netflix debió aclarar que se trata de una obra de ficción. Aun así, la verosimilitud de la propuesta y su anclaje en temas de la agenda internacional actual contribuyen a ese efecto de realismo que tanto engancha.
Día cero se compone de solo seis episodios de una hora, lo que la vuelve ideal para una maratón de fin de semana. Sin necesidad de extenderse más de lo necesario, la serie va directo al conflicto y construye una tensión creciente que se sostiene hasta el último segundo.
