Redacción El País
Tenía todas las de perder, pero como dijeron algunos relatores «se dio el milagro». Bolivia tenía que ganarle a Brasil como local en la última fecha de las Eliminatorias Sudamericanas y esperar que Venezuela, también en su casa, no sumara de a tres ante Colombia. Se dio todo, la Verde se clasificó al repechaje y su referente, el arquero Carlos Lampe, que hace ocho años escribió un mensaje sobre Uruguay que ahora tiene mucho que ver, se emocionó hasta las lágrimas y festejó con un regalo que le dio James Rodríguez.
«Se va a extrañar la Eliminatoria.. que lindo ver como Uruguay festejaba con su gente su clasificación. Eso quiero para nosotros», escribió el arquero boliviano el 12 de octubre de 2017, días después de que su selección cayera 4-2 ante la Celeste en el Centenario con goles de Cáceres, Cavani y un doblete de Suárez. Los jugadores de Bolivia vieron cómo la selección uruguaya festejó con su gente y este martes se les dio a ellos algo muy similar porque el sueño mundialista de la Verde sigue vivo tras clasificar al repechaje. Bolivia estuvo en el Mundial de 1930, en el del 1950 y en Estados Unidos 1994.
Lampe tiene 38 años y ayer, como obra del destino se quedó con la última pelota del partido y el árbitro se la pidió para dar el encuentro por finalizado. Bolivia le había ganado 1-0 nada más y nada menos que a Brasil gracias al gol de Miguel Terceros y se clasificaba al repechaje gracias a la victoria de Colombia por 6-3 en Venezuela.
«La emoción no me permite seguir el partido. Estoy emocionado igual que ustedes», dijo un relator boliviano casi hasta las lágrimas. «¡Estamos en el repechaje! ¡Lo logramos, estamos en el reprechaje! Para toda la gente que no creyó, mi Bolivia está en el Mundial, hemos llegado al repechaje. ¡Para estos muchachos que se sacaron la bronca!», celebró. Y uno de esos muchachos era Carlos Lampe, que dentro de la cancha estaba igual de emocionado que él, llorando luego de darle la pelota al árbitro.
El emocionante relato y las lágrimas de Carlos Lampe:
«Se ganó una batalla importante, fue muy difícil, muy duro, no dependíamos de nosotros. Se sufrió para llegar a este momento, pero hay mucha satisfacción porque no le fallamos a nuestra gente. Ahora tenemos que prepararnos para ir a pelear esa guerra. He vuelto bien después de la lesión, en esta Eliminatoria jugué cuatro partidos y gané tres. Acá no me hicieron goles. Disfruto todos los días de entrenar. Ya no tengo ni lágrimas de todo lo que lloré. Uno trata de aconsejarlos y alentarlos. Somos una familia hermosa, nos da gusto representar a nuestro país y ahora se viene lo mejor», palpitó el arquero que festejó de manera muy particular en la caravana de los jugadores.
Lampe es un agradecido y Bolivia le debe una parte de su clasificación a Colombia que, ya clasificada, jugó con gran profesionalismo en Venezuela y venció a la Vinotinto que dependía de sí misma. El arquero del Bolívar, de gran trayectoria, ha cambiado camisetas con grandes jugadores como Lionel Messi y decidió apelar a su colección para los festejos. Se puso la de James Rodríguez, el 10 de la selección cafetera, con el que los bolivianos seguro están muy agradecidos.
Lampe con la camiseta de Colombia en los festejos de Bolivia:
Las perlitas de la clasificación de la Verde al Mundial:
Todavía falta, el repechaje, pero Bolivia tiene razones suficientes para celebrar que la ilusión de clasificar a su cuarto Mundial en la historia sigue viva. En el vestuario los jugadores festejaron cantando «La Cumbia de los Trapos» de la banda de cumbia argentina Yerba Brava, los hinchas accidentalmente prendieron fuego un pino con fuegos artificiales, un protagonista actualizó su meme y el pueblo llenó las calles.