Morena Rial atraviesa días difíciles tras ser trasladada a la Unidad Penitenciaria N° 51 de Magdalena, donde cumple detención por una causa de robo agravado. En medio de este contexto, se produjo un hecho que marcó un giro en su historia familiar: el primer contacto con su padre, Jorge Rial, desde la cárcel. La comunicación fue confirmada por su abogado, Martín Leiro, en una entrevista con el programa Diario de Mariana – DDM (América TV), donde relató cómo se concretó la llamada y qué ocurrió durante esos minutos.

Según Leiro, la conversación se dio gracias a la insistencia del periodista, que gestionó personalmente el llamado a través del conmutador del penal, ya que Morena no tiene acceso a un celular como otras internas. “Jorge le puso mucha voluntad para llamarla porque llamó al conmutador, como cualquiera”, explicó el letrado, destacando la predisposición del conductor para acompañar a su hija en este momento. “Cuando llegué al penal, Morena estaba conmocionada y en llanto porque estaba hablando con su papá”, agregó.
El diálogo fue breve, pero cargado de significado. De acuerdo con el abogado, Jorge se mostró dispuesto a colaborar en todo lo que esté a su alcance para mejorar la situación judicial de Morena. “Su papá la llamó. Estaba muy emocionada por eso. Se puso a disposición”, afirmó Leiro, quien también reveló que la joven le expresó su deseo de mantener contacto con su hijo Amadeo, que el próximo 7 de octubre cumplirá un año. El equipo legal trabaja para que pueda participar, al menos de manera virtual, en el festejo.
Respecto a las condiciones de detención, Leiro desmintió rumores sobre un aislamiento extremo y describió la celda como “más monoambiente que buzón”: cuenta con cama de hormigón, colchón ignífugo, frazadas, baño y ventana. Además, la unidad dispone de un gabinete psicológico, donde Morena ya tuvo una entrevista de más de una hora y media con profesionales. “Se mostró tranquila y receptiva”, aseguró el abogado, aunque admitió que la situación emocional sigue siendo delicada.
En paralelo, la influencer escribió una carta desde prisión para desmentir rumores y aclarar que no tiene comunicación con nadie fuera de su círculo íntimo. “Quiero que sepan que donde estoy no tengo comunicación con nadie más que con mis abogados y un núcleo muy pequeño de allegados”, expresó en el texto, difundido por su defensa. También negó haber pedido que su hijo la visite en la cárcel: “Mis abogados están gestionando videollamadas con él. No es que no lo quiera ver, sino que este no es el ámbito que quiero para él”.
Este primer llamado entre padre e hija no solo refleja un acercamiento en medio de la adversidad, sino que también abre la posibilidad de recomponer un vínculo marcado por altibajos. Mientras tanto, la causa judicial sigue su curso y la familia espera que la situación se resuelva pronto.