Los lanzamientos de Apple y Samsung no solo sirven para presentar nuevos teléfonos: también marcan el pulso de toda la industria móvil. En un rincón, el iPhone, símbolo de estatus y de integración total con el ecosistema iOS. Del otro, los Galaxy S, que no solo buscan competir, sino marcar un liderazgo claro entre los Android.
En 2025, el duelo se vuelve más parejo que nunca entre el iPhone 17 Pro y el Galaxy S25 Ultra, dos modelos premium que apuntan a conquistar el bolsillo —y la preferencia— de millones de usuarios en el mundo.
Con una estrategia centrada en la innovación, ambos salen a competir sus armas más fuertes: Apple refuerza su sistema de cámaras Pro con un zoom de hasta 8x y un chip A19 Pro optimizado para inteligencia artificial local, mientras que Samsung despliega un arsenal de cuatro cámaras con 200 megapíxeles y funciones avanzadas de Galaxy AI que buscan integrar la vida digital sin depender de la nube.
A continuación, una comparativa al detalle entre los dos titanes de la gama alta.
Diseño y materiales: titanio contra aluminio

Desde su lanzamiento a fines de enero, el Galaxy S25 Ultra apostó por la robustez: marco de titanio que lo hizo más liviano que su antecesor, resistencia IP68 (agua y polvo) y el nuevo Gorilla Armor 2, que lo hace menos propenso a rayaduras y caídas. Samsung redujo además un 15% el grosor, logrando un equipo más cómodo de usar pese a su gran tamaño.
A todas las características le sumaron el lápiz óptico S Pen, sello distintivo de la línea Ultra, con la salvedad que en esta oportunidad no cuenta con Bluetooth para usar el teléfono a distancia.
Apple, en cambio, llevó la ingeniería del iPhone 17 Pro hacia un diseño unibody de aluminio forjado con un sistema de enfriamiento más avanzado, clave para sostener el rendimiento del chip A19 Pro. Ambos dispositivos transmiten solidez y calidad, pero con filosofías distintas: Samsung prioriza la resistencia extrema, mientras que Apple busca combinar ligereza y potencia sostenida.
Pantallas y experiencia visual

En este terreno, tanto Apple como Samsung compiten en la primera línea de innovación. El iPhone 17 Pro integra una pantalla Super Retina XDR de 6.3 pulgadas (6.9 en la versión Pro Max) con soporte para ProMotion de hasta 120 Hz, brillo de 3.000 nits y tecnologías de ajuste dinámico del color.
Por si fuera poco, Apple incluyó el revestimiento especial Ceramic Shield 2, que ofrece una resistencia tres veces mayor a los rayones en comparación con las generaciones anteriores, para resguardar el cristal tanto en la parte frontal como la trasera.
El Galaxy S25 Ultra no se queda atrás: panel Dynamic AMOLED 2X de 6,9 pulgadas, 2600 nits, resolución 2K, tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz y mejoras en el antirreflejo gracias al Gorilla Armor 2.
En la práctica, ambos ofrecen experiencias inmersivas para juegos, series o navegación, aunque Samsung conserva cierta ventaja en tamaño y amplitud de pantalla.
Cámaras: un duelo en el zoom y la versatilidad

La fotografía es uno de los ejes más relevantes de la comparativa. El iPhone 17 Pro presenta un sistema de tres cámaras Fusion de 48 MP con ultra gran angular y un teleobjetivo de 200 mm capaz de llegar hasta un zoom óptico de 8x. «Es como tener 8 lentes profesionales en tu bolsillo», remarcan.
La cámara frontal o selfie -conocida como Center Stage- tiene 18 MP e incorpora un sistema de encuadre inteligente que se adapta al número de personas en la foto y permite pasar de vertical a horizontal sin girar el dispositivo.
Apple también destaca por su integración con software: edición avanzada, modo noche optimizado y video en ProRes RAW con hasta 4K Dolby Vision a 120 cuadros por segundo (fps).
En este sentido, la marca de la manzanita dejó en claro que puso el foco en mejorar aún más la calidad de sus fotografiás con baja luz. Además, hizo posible que las fotos en superalta resolución tengan 24 MP por defecto y sumó funciones como el modo Noche, retratos con profundidad y el Borrador para eliminar objetos no deseados.

Por su parte, el Galaxy S25 Ultra eleva la vara en versatilidad: cámara principal de 200 MP y zoom digital de hasta 100x. El resto de los sensores que componen este módulo cuádruple: un ultra gran angular de 50 MP y un teleobjetivo doble (10 MP con zoom 3x y 50 MP con zoom 5x). Para el video, tiene la capacidad de grabar en resolución 8K a 30 fps.
La cámara frontal, por su parte, tiene 12 MP (f/2.2) con autoenfoque y grabación de alta calidad.
Samsung refuerza su propuesta para fotos y video con el motor ProVisual y un filtro espacio-temporal que mejora los resultados en fotos nocturnas y videos en condiciones de poca luz.
En este apartado clave para gran parte de los usuarios de móviles, Apple ofrece precisión y naturalidad de colores con un zoom inédito en su línea, mientras que la marca coreana entrega más opciones de lentes y configuraciones para distintos escenarios.
Inteligencia artificial: Apple Intelligence vs. Galaxy AI

La batalla de la IA es uno de los capítulos más interesantes de esta generación.
Apple incorpora Apple Intelligence, su plataforma que facilita tareas cotidianas con funciones como traducción en vivo en llamadas, herramientas de escritura y edición automática de fotos y videos. Todo corre en el chip A19 Pro, con aceleradores neurales que permiten procesamiento en el dispositivo sin depender de la nube.
Samsung responde con Galaxy AI, una suite que combina la potencia del Snapdragon 8 Elite y la colaboración con Google Gemini. Entre sus funciones más destacadas están Audio Eraser para remover ese sonido indeseable de los videos, Drawing Assist para generar imágenes a partir de bocetos y un sistema de búsqueda contextual en fotos o configuraciones del teléfono.
Ambos ecosistemas buscan que el usuario interactúe con el dispositivo de manera más natural, aunque con enfoques distintos: Apple se concentra en la privacidad y la integración con iOS, mientras que Samsung apuesta a la apertura hacia aplicaciones de terceros y la colaboración con Google.
Rendimiento y autonomía
El iPhone 17 Pro incorpora el chip A19 Pro, con una mejora del 40% en CPU y GPU respecto a generaciones anteriores. El sistema de enfriamiento por cámara de vapor garantiza rendimiento sostenido en tareas intensivas como edición de video o gaming.
La autonomía alcanza hasta 31 horas de reproducción de video en el modelo Pro y 37 en el Pro Max; aunque la marca no dio a conocer la capacidad real de la batería.
El Galaxy S25 Ultra, por su parte, estrena el Snapdragon 8 Elite de 3 nm, que también promete un salto del 40% en eficiencia y rendimiento.
Su batería de 5.000 mAh, combinada con carga rápida de 45W y carga inalámbrica Qi2, asegura jornadas completas incluso para usuarios exigentes que utilizan el celular para edición de video y gaming.
En este terreno, ambos cumplen con creces, aunque Apple conserva su optimización histórica entre hardware y software, mientras que Samsung ofrece más flexibilidad en opciones de carga.
Ecosistema y software
El iPhone 17 Pro llega con el flamante sistema operativo iOS 26 y novedades como la pantalla Liquid Glass y mejoras en FaceTime, Mensajes y seguridad. Apple sigue capitalizando su ecosistema cerrado, donde cada dispositivo se potencia con el otro.
Samsung apuesta a la integración con sus Galaxy Buds, relojes y tablets, y refuerza la sinergia con Google. Además, garantiza hasta siete años de actualizaciones de software, un punto clave que reduce la brecha con Apple en soporte a largo plazo.
Apple reforzó este año su liderazgo con una versión Pro y Pro Max que se sostiene por sus tres pilares: rendimiento integración y privacidad; Samsung, en tanto, desarrolló un teléfono premium basado en la versatilidad de las cámaras, la resistencia física y un ecosistema más abierto.
iPhone 17 Pro vs. Galaxy S25 Ultra: conclusión final
El iPhone 17 Pro y el Galaxy S25 Ultra son dos smartphones premium que destacan en áreas distintas: Apple privilegia integración, rendimiento y precisión fotográfica; Samsung apuesta a versatilidad, cámaras más potentes y resistencia. Cada uno cumple con creces, y la elección final dependerá de lo que valore cada usuario.
SL