La crisis y la falta de poder adquisitivo se nota en la baja del consumo, incluso, en los productos más esenciales, como la comida. Y esto se refleja en todos los relevamientos, como el más reciente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que informó que, en agosto, las ventas minoristas cayeron 2,6 por ciento interanual.
Y La Matanza replica estos datos. Porque, según un informe realizado por la Secretaría de Producción local, las ventas comerciales tuvieron un descenso de 17 por ciento promedio en el segundo trimestre, en comparación con el mismo período del 2023, es decir, antes de la asunción de Javier Milei en la presidencia.
En la discriminación por rubros, el textil es el más golpeado a nivel local, ya que Calzado tuvo un desplome de 30 por ciento, seguido por Indumentaria, con un 25. El listado continúa con Librería, que tuvo una disminución de 23 por ciento; Almacén, con -21; y Óptica y Peluquería, ambos con -20.
Pérdida de empleo y expectativas
Por otra parte, el relevamiento matancero da cuenta de que, en materia de empleo, la situación también es preocupante. Porque, en el mismo período, la pérdida de puestos de trabajo llegó al diez por ciento. Además, el 25 por ciento de los encuestados indicó que, en el primer trimestre de este año, despidió trabajadores.
Por último, en lo que concierne a la expectativa de los comerciantes, los datos tampoco son positivos. Porque un 33 por ciento de los comercios señaló que cree que su situación en el corto y mediano plazo será mala, mientras que un 63 vio un escenario regular. En contrapartida, solo un cuatro por ciento avizoró un horizonte bueno para su rentabilidad.