El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, bajo la gestión de Axel Kicillof, anunció hoy que logró un acuerdo con los bonistas que tenían sentencias firmes en los tribunales de Nueva York y que no habían ingresado al canje de deuda de 2021. Con este entendimiento —que replica las cláusulas principales del canje original— la provincia declara prácticamente cerrados los litigios internacionales pendientes.
Las condiciones ofrecidas son similares a las aceptadas por la mayoría de los bonistas en 2021.
Los bonistas recibirán la misma cantidad de Bonos A en dólares con vencimiento en 2037 que les hubieran correspondido si hubieran ingresado al canje de 2021, junto con un pago en efectivo equivalente a los servicios devengados y pagados de esos bonos desde 2021 hasta la actualidad.
En Nueva York se estimaba que los bonistas reclamaban unos US$ 169 millones, pero el monto convenido es mucho menor: cerca de US$ 38,7 millones en efectivo y bonos por US$ 67 millones.
Entre 2016 y 2019, el endeudamiento de la Provincia en moneda extranjera creció fuertemente, con emisiones internacionales que superaron los US$ 5.000 millones. Durante ese período, el peso de los servicios de deuda sobre los recursos provinciales pasó de representar aproximadamente 10 % a cerca del 20 % de los recursos corrientes netos de coparticipación.
En 2020-2021, la Provincia realizó un canje de deuda internacional bajo ley extranjera, aceptado por el 97,66 % de los acreedores. Esa reestructuración permitió renovar los vencimientos y establecer nuevos instrumentos cuyos servicios la Provincia ha venido cumpliendo semestralmente.
Con este acuerdo, Buenos Aires da por finalizados los juicios internacionales por los bonos no ingresados al canje de 2021, lo que elimina un pasivo legal significativo.
El ministro de Economía bonaerense, Pablo López, destacó que el entendimiento reafirma el compromiso con la sostenibilidad de la deuda y el manejo fiscal responsable, incluso en un contexto macroeconómico complejo. i
También se informa que se han formalizado desistimientos de demandas que se tramitaban en Alemania, completando así prácticamente todos los juicios pendientes a bonistas internacionales.