Con solo 7 años, Taleb Galarza se convirtió en el primer misionero en integrar la Selección Argentina de Kick Boxing. Entrena a diario bajo la guía de su padre y ahora se prepara para representar al país en el Campeonato Panamericano que se disputará en Guatemala.
“Me sentí muy feliz, animado y muy preparado para ir a Guatemala”, dijo Taleb Galarza, el niño de 7 años que ya marcó un hecho histórico para Misiones al convertirse en el primer misionero de su edad en integrar la Selección Argentina de Kick Boxing. Su próximo desafío será representar al país en el Campeonato Panamericano que se disputará en Guatemala.
Taleb eligió como modalidad favorita el point fight, una disciplina de lucha por puntos que lo motiva en cada entrenamiento. Con la frescura de su edad, se anima a transmitir un mensaje que resume su disciplina: “Vas a tener que entrenar y cumplir con el deporte todos los días, todos podemos, es importante entrenar”. Taleb pasa todas sus mañanas en el trabajo con su mamá y entrena en la Academia de su papá. Cuando sale de la escuela, se va directo al gimnasio a realizar sus entrenamientos diarios, así también cumple con todas sus tareas diarias del colegio.
Orgullo familiar y valores del deporte
El pequeño deportista tiene referentes claros: Mauro Vázquez, campeón argentino de point fight, y su papá, Paolo Galarza, actual campeón Argentino Profesional K-1 en la división Pluma. “Mi papá es mi profesor y mi ídolo”, asegura Taleb, que comparte sus mañanas con su mamá, Nadia García, y al salir de la escuela se dirige a la academia de su padre para entrenar.
Para Nadia, este presente es motivo de satisfacción: “Es un orgullo para nosotros como padres que Taleb a tan corta edad pueda ser parte de la Selección y cumplir su sueño. Él es claramente un ejemplo para nosotros por todo lo que hace e hizo para ganarse un lugar”. Ella también resalta cómo el Kick Boxing fue moldeando la vida de su hijo: “el Kick Boxing marcó un antes y un después en la vida de Taleb. Desde que nació le llamaron la atención los entrenamientos y la actividad física, eso hizo que desde muy pequeño obtenga los valores del esfuerzo, compromiso, respeto, dedicación y resiliencia en cualquier objetivo que se proponga para su vida”.
La familia destaca que estos aprendizajes van más allá. “El deporte es la base fundamental de valores para los niños”, sostiene la mamá, convencida de que acompañar los sueños de los hijos es clave. En ese sentido, deja un mensaje a otros padres: “Hablen y charlen más con sus hijos, conéctense, que sepan cuál es el camino que quieren hacer sus hijos, y nunca dejen de creer en ellos”.
Rumbo al Panamericano
Con el acompañamiento de su familia y el respaldo de la Selección Argentina, Taleb vive una preparación intensa y entusiasta. “Me siento seguro y con muchas ganas de poder ir y participar en el Panamericano”, afirma con la determinación de quien ya se imagina sobre el tatami internacional.
A los 7 años, Taleb Galarza ya inspira a la comunidad misionera y al mundo del kick boxing argentino. Su historia demuestra que los sueños no entienden de edades y que con disciplina, esfuerzo y apoyo familiar es posible abrir caminos hacia logros impensados.
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