El gobernador Rolando Figueroa destacó que en un año y nueve meses la provincia de Neuquén bajó su deuda de 1.267 a 877 millones de dólares, una reducción del 31%. Se pagaron 508 millones en compromisos y se invirtieron más de 1.110 millones de dólares en infraestructura, en su mayoría con fondos propios.
En apenas un año y nueve meses de gestión, el gobierno de la provincia de Neuquén logró una reducción histórica de su deuda pública. Según los datos registrados en agosto de 2025, el stock de deuda asciende a 877 millones de dólares, frente a los 1.267 millones heredados en noviembre de 2023.
Esto implica una disminución del 31%, equivalente a 390 millones de dólares, resultado de un fuerte proceso de ordenamiento fiscal.
Pago de deuda e inversión en obras
Durante este período, la provincia pagó 508 millones de dólares en compromisos financieros, incluyendo intereses y amortización de capital. Al mismo tiempo, destinó más de 1.110 millones de dólares a obras de infraestructura y desarrollo, con un esquema que permitió volcar más del 10% de los ingresos provinciales a inversión pública.
Fondos propios y menor dependencia externa
El gobernador subrayó que más del 81% de las inversiones provienen de recursos propios, lo que refleja una menor dependencia del endeudamiento externo y de aportes extraordinarios.
“Pasamos de una provincia quebrada, con un atraso en infraestructura de más de 4.000 millones de dólares, a una provincia con superávit, en proceso de desendeudamiento y con obras en marcha”, destacó Rolando Figueroa.
Regionalización y prioridades
El reordenamiento fiscal permitió recuperar obras en ejecución, priorizar proyectos estratégicos y dinamizar las economías regionales. A través de los Pactos de Gobernanza I y II, los municipios se integraron como actores centrales en la planificación y ejecución de obras.
Impacto en la calidad de vida
La administración provincial destacó que la reducción de gastos innecesarios y el fortalecimiento de la transparencia posibilitaron invertir en rutas, escuelas, centros de salud, cárceles, saneamiento y agua potable, obras que buscan mejorar de manera directa los servicios y la calidad de vida de los neuquinos y neuquinas.