El fantasma del agua vuelve a sobrevolar el partido de Bragado, y la preocupación en el sector agropecuario crece. Martín de la Serna, un reconocido productor rural de la zona, ha expresado públicamente su profunda alarma ante el avance del líquido que, según sus declaraciones, ya ha impactado en «varias hectáreas» productivas, poniendo en jaque la actividad y la conectividad vial.
De la Serna no solo manifestó su inquietud, sino que reveló que la situación ha movilizado a la comunidad rural. «Nos reunimos cerca de 50 productores con el intendente», afirmó el ruralista, dejando en claro la magnitud del problema y la necesidad de buscar soluciones urgentes. El foco principal de la preocupación recae en la red vial, vital para el traslado de la producción y la vida diaria de los habitantes. «Hay gente aislada, no hay un plan B para este tema», sentenció De la Serna, subrayando la falta de alternativas ante el colapso de los caminos.
La crítica del productor no se detuvo ahí. De la Serna recordó un antecedente que, a su juicio, no fue debidamente atendido: «No le dieron pelota al pedido que había hecho en marzo la concejal Labqui, que junto a un ingeniero advirtieron sobre esta situación». Esta declaración pone de manifiesto una posible falta de previsión o acción temprana que hoy agrava el escenario.
La tensión entre la urgencia de los productores y la respuesta de las autoridades parece ser un punto central. «Le pedimos una resolución inmediata y se ponen nerviosos», disparó De la Serna, reflejando la frustración del sector ante lo que perciben como una demora en la implementación de medidas concretas para mitigar los efectos del agua y salvaguardar la producción y la conectividad del partido.
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