Misteriosa desaparición en Salta: buscan intensamente al exjefe de Investigaciones de la Policía
Por estas horas, la Policía de Salta lleva adelante un amplio operativo para dar con el exdirector de Investigaciones, Vicente Cordeyro, cuyo paradero es desconocido desde el jueves al mediodía. La desaparición del excomisario, una figura reconocida dentro de la fuerza por su trayectoria en casos resonantes, mantiene en vilo a la provincia.
Una rutina interrumpida
El jueves por la mañana, Cordeyro dejó a su hija en el Colegio del Jesús, en pleno centro de la capital salteña. Lo hizo a bordo de su Volkswagen Suran gris, el mismo vehículo en el que solía movilizarse habitualmente.
Debía regresar al mediodía para retirarla, pero nunca apareció.
Ante la falta de comunicación, familiares y allegados dieron aviso a la policía, que activó el protocolo de búsqueda de personas.
El hallazgo del vehículo
Horas más tarde, cerca de las 21 del jueves, efectivos de la fuerza hallaron la Suran estacionada en la localidad de San Lorenzo, a pocos kilómetros de la capital. El auto estaba cerrado, sin signos de violencia ni ocupantes.
Peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) realizaron un relevamiento completo del vehículo, tomaron muestras biológicas y levantaron huellas para análisis.
Las cámaras de seguridad analizadas hasta ahora confirman que Cordeyro viajó solo hacia San Lorenzo y que no hay registros de su regreso.
Un operativo sin descanso
Desde la madrugada de este viernes, más de 100 efectivos policiales, junto a canes rastreadores y equipos de montaña, recorren la zona de la Quebrada de San Lorenzo, donde se centra la búsqueda.
También se desplegaron controles vehiculares, patrullajes en áreas rurales y un relevamiento en hospitales y centros de salud, aunque hasta el momento no se ha encontrado ningún rastro del excomisario. Intervienen distintas áreas investigativas y operativas. Según fuentes policiales, no hay señales que indiquen otro posible destino.
Una figura reconocida dentro de la Policía
Vicente Cordeyro es un nombre conocido en el ámbito policial salteño. Durante su carrera, ocupó distintos cargos hasta llegar a la jefatura de la Brigada de Investigaciones, donde participó en casos de alto impacto.
Entre ellos, el crimen de los hermanitos Leguina y la captura del asesino serial Marcelo Alejandro Torrico, junto a su cómplice Ariel Brandán, que conmocionaron a la provincia años atrás.