Celeste Cid y Santi Korovsky viajaron a Croacia y compartieron en redes sociales una serie de fotos que no solo capturaron paisajes de ensueño, sino también un momento profundamente emotivo: la visita a Ugljan, una pequeña isla croata que guarda un vínculo especial con la historia familiar de la actriz.

“Mi abuela Miranda llegó a la Argentina cuando tenía 6 años”, escribió Celeste en una publicación que rápidamente se volvió viral. “Cuando mi mamá me contó que lo único que mi abuela recordaba de Ugljan -la islita croata en la cual vivía- era que había ‘muchas flores’, entendí mi fascinación por ellas”, agregó, revelando una conexión íntima entre su presente y el pasado de su familia.
La pareja decidió visitar la isla para conocer el lugar donde Miranda vivió y donde sus bisabuelos se casaron: la iglesia Church of Our Lady of the Rosary. Sin embargo, lo que parecía ser un momento de reencuentro con sus raíces se convirtió en una anécdota divertida y conmovedora. “Mandé videos y fotos a toda mi familia desde la iglesia rosa, material emocionante que un rato más tarde no tuvo ningún tipo de sentido porque estábamos en la iglesia equivocada: no era”, relató con humor.

A pesar del error, Celeste decidió compartir las imágenes tomadas en ese lugar, destacando que “son muy lindas, y estábamos muy felices cuando las tomamos”. Pero la historia no terminó ahí. Santi Korovsky, actor y pareja de Celeste, se convirtió en el héroe inesperado del día: “Santi Korovsky fue quien resolvió el acertijo y volvió con la bici a buscar mi libro, que había quedado cuál ofrenda en la iglesia del error”, contó la actriz.
El gesto de llevar su libro, con una tapa decorada con flores, hasta la iglesia fue para ella una forma de “devolverle a ese lugar un pedazo de su (mi) historia”. La publicación se llenó de comentarios de seguidores conmovidos por el relato, entre ellos el propio Santi, quien escribió: “Alguien que le avise a Miranda que su nieta es lo más hermoso que hay”.

Las imágenes muestran a la pareja disfrutando del paisaje croata, entre callejuelas empedradas, iglesias centenarias y jardines floridos. La complicidad entre ambos es evidente, y el viaje parece haber sido una experiencia transformadora, tanto en lo personal como en lo emocional.
Celeste, que suele compartir momentos íntimos y reflexivos en sus redes, volvió a demostrar que su sensibilidad y conexión con sus raíces son parte esencial de su identidad. En esta ocasión, el viaje a Croacia no fue solo una escapada romántica, sino también una búsqueda de sentido, de memoria y de pertenencia.