Las producciones internacionales siguen marcando tendencia en Netflix y, en este comienzo de 2025, una película francesa logró instalarse entre lo más visto de la plataforma. Se trata de Ad Vitam, un thriller de acción y suspenso que dura apenas 1 hora y 38 minutos y que, desde su estreno el 10 de enero, se convirtió en un verdadero fenómeno global.
La trama sigue a Franck Lazarev (Guillaume Canet), un ex integrante de la Brigada de Intervención de Élite francesa que escapa de un intento de asesinato y se lanza en una carrera contrarreloj para rescatar a su esposa Léo (Stéphane Caillard), secuestrada por un grupo misterioso de hombres armados. Lo que comienza como una misión personal se convierte en un oscuro asunto de Estado, donde el protagonista se ve envuelto en una red de secretos y conspiraciones que escapan por completo a su control.

Dirigida por Rodolphe Lauga, la película combina escenas de persecuciones intensas, enfrentamientos armados y giros inesperados que mantienen en vilo al espectador. Canet, además de protagonizar, participó en el guion junto a Lauga y David Corona, reforzando el sello personal de esta producción que mezcla adrenalina y drama. A su lado, completan el elenco Nassim Lyes, Zita Hanrot, Alexis Manenti y Johan Heldenbergh.
Aunque las críticas no fueron del todo favorables, el público respondió con entusiasmo. Desde Leisure Byte señalaron que “no parece equilibrar bien ambos puntos de la historia”, mientras que Heaven of Horror sostuvo: “La historia no es lo suficientemente fuerte en esta película. Claro, hay momentos buenos y fuertes, pero en general se siente deficiente”. En la misma línea, DNYUZ apuntó: “La trama mínima pretende respaldar la narración espartana, pero después de un comienzo prometedor, la película se desvía hacia un flashback demasiado largo”.

Lejos de verse afectada por estas valoraciones, Ad Vitam ya acumula más de 91 millones de horas reproducidas y 56 millones de visualizaciones, alcanzando el décimo puesto en el ranking histórico de películas de habla no inglesa de Netflix. Según las proyecciones, podría escalar aún más y superar a la italiana Me llamo venganza, con la que la separan apenas 400 mil visualizaciones.
Este éxito confirma el creciente interés del público global por contenidos internacionales. En los últimos años, Netflix apostó a producciones de Corea del Sur, España, México y Francia, que demostraron que las historias locales, contadas con frescura y autenticidad, pueden convertirse en fenómenos mundiales. Con su ritmo vertiginoso, sus escenas de acción y el magnetismo de Guillaume Canet, Ad Vitam se sumó a esa lista de títulos que rompen fronteras y se vuelven parte de la conversación global.