Después de muchos años, La Patada Blues regresa a Tandil. La banda nacida en Azul en 1978, con más de cuatro décadas de trayectoria y una marca inconfundible en la escena del rock y el blues nacional, se presentará el viernes 26 de septiembre en Macanudo (Rodríguez 459), con una cena-show desde las 21:30 y entrada al sobre.
«Hace mucho tiempo que no vamos a Tandil, fuimos hace muchos años», recuerda Miguel Mugueta, integrante del grupo. «Siempre hemos girado por Azul, Olavarría, Laprida, La Costa, pero a Tandil hace mucho que no vamos. Preguntando a algunos amigos que tenemos por allá, nos dijeron que es lugar muy especial, muy agradable para tocar».
La propuesta para este reencuentro con el público serrano será un viaje a través de toda su historia. «Elegimos hacer una síntesis de tantos años. Somos una banda del año 78, venimos de aquella formación musical y de vida, en aquel océano verde militar, entre militancia y arte éramos un grupo de pibes jóvenes que nos juntábamos en algún bar, donde podíamos estar mientras no caía la policía. Fuimos haciendo muchas canciones a partir de ese momento. Mostramos los temas de aquellos tiempos que teníamos 18 años hasta hoy que somos un poquito más grandes. Seguimos teniendo el espíritu que un poco ha desaparecido», señala Mugueta.
Ese espíritu tiene que ver con una mirada crítica y coherente sobre la música y su contexto. «Lo que es el rock and roll como expresión o movimiento mundial ha desaparecido. Hoy no encontramos bandas de rock, sino no sé qué, salvo algún caso excepcional entre las bandas nuevas. Nosotros hemos adquirido alguna coherencia en ese sentido», sostiene.
En este análisis, también aparece el vínculo entre la música y la política. «En momentos donde todo es más complicado, donde gobernó la derecha como ahora, surgieron los movimientos más contraculturales como el rock. Podría pasar ahora. Tendría que ser así de acuerdo a lo que ha venido sucediendo, a mayor apriete de la derecha más fue la resistencia. Pero parecería que este último tramo que nos toca vivir están pasando cosas bastante diferentes», reflexiona.
A lo largo de su historia, La Patada también supo nutrirse de diversas influencias. «En el grupo también hay músicos que hicieron mucho folclore progresivo, así que también hay un componente de folclore latinoamericano sin ser una búsqueda de fusión. Lo nuestro es el rock y blues», explica Mugueta, marcando el perfil sonoro de la banda.
Consultado por la vigencia del grupo, destaca la importancia de sostener un proyecto en el tiempo sobre bases firmes. «Siempre tuvimos la idea de que para conformar cualquier grupo humano, lo más relevante es la cuestión ideológica. Tiene que haber una unidad para cualquier laburo. Yo soy antropólogo y docente de la universidad, y no puedo laburar en un mismo proyecto con un colega de derecha. Aparte, le sumamos el factor humano, que haya una buena relación, coincidencias en un montón de cosas», afirma.
La Patada se presenta este viernes 26 de septiembre a las 21:30 hs en Macanudo (Rodriguez 459). Más información en el Instagram: @macanudo_tandil
