
La captura de Erick Moreno Hernández, conocido como ‘El Monstruo’, ha generado nuevas perspectivas y la posibilidad de descubrir a quienes están detrás de la organización ‘Los Injertos de Lima Norte’. Los cuatro equipos incautados al líder más buscado en Perú serán elementos clave para extraer información e identificar a más implicados, según confirmó el ministro del Interior, Carlos Malaver.
Sin embargo, la “desconfianza” ha surgido tras las revelaciones del periodista paraguayo Iván Leguizamón, quien ha seguido de cerca la situación en Paraguay. Leguizamón afirmó que Moreno Hernández logró evadir la captura en varias ocasiones debido a filtraciones de información por parte de agentes peruanos.
Esta versión no ha sido descartada por la PNP, pero fue confirmada por el actual ministro de Justicia, Juan José Santivañez, quien indicó que al menos dos efectivos facilitaron información, lo que frustró la captura durante su gestión. Como consecuencia, la Policía paraguaya ha mostrado desconfianza hacia sus homólogos peruanos.
A través de su cuenta de X, antes Twitter, el periodista brindó estos detalles, pero también aseveró que las autoridades paraguayas han mostrado “molestias” porque la PNP del Perú aseveró que la captura se dio gracias a la información proporcionada por ellos.
“Erick Moreno, alias ‘El Monstruo’, usará uniforme rojo en la cárcel. Por desconfianza, Paraguay se niega a entregar a Perú los celulares incautados. La extracción de datos de los teléfonos se haría en Asunción y solo el resultado se enviaría a Lima”, se lee.
De acuerdo con la publicación en el medio ABC, los equipos fueron entregados a la Unidad Especial de Inteligencia (SIU), la cual es una oficina élite que administra la DEA de Estados Unidos. El comunicador lo señala como “incorruptible”, por lo que existe una mínima posibilidad de que se pierdan datos, luego de que no se descarte que policías peruanos sean parte de esta banda criminal.
El comisario Marcelino Espinoza, director de Investigación de Hechos Punibles de la Policía de Paraguay, reveló que la DEA participó de forma secreta en la captura de Erick Moreno Hernández.
La colaboración entre la DEA y la policía paraguaya se realizó sin informar previamente a las autoridades peruanas. Esta decisión respondió a la “desconfianza” generada por posibles filtraciones internas, luego de que se detectara que agentes peruanos habrían alertado a Moreno Hernández durante intentos previos de captura.
“Entre nosotros no hubo ningún policía peruano, aunque sí comunicación directa de nuestros personales con la policía peruana sobre alguna información que ellos estaban manejando”, señaló a Exitosa.
Además, las autoridades han señalado que trabajaron con los efectivos peruanos para obtener más información, pero que esta intervención fue secreta.
Los investigadores ya seguían los pasos a Moreno, quien hace 10 días había alquilado la vivienda en Asunción, pero su poca actividad en la zona llamó la atención de los vecinos. El líder más buscado evitaba salir del inmueble, pero tenía a una compañera, quien salía y compraba alimentos.
No obstante, también identificaron una ropa interior masculina en la lavandería que llamó la atención de las autoridades. Cada