En medio de un nuevo capítulo en el conflicto legal con Mauro Icardi, Wanda Nara sorprendió este viernes al subir a sus historias de Instagram una foto de Martín Migueles, el empresario con quien se la vinculó sentimentalmente en los últimos meses y días atrás ella confirmó el vínculo.
La imagen, aparentemente cotidiana, mostraba a Migueles sentado en el comedor de la conductora, con un perrito en brazos y un detalle que no pasó desapercibido: Wanda le agregó un emoji de corazón rojo.
Lo llamativo no fue la foto en sí, sino el momento en que la publicó. La historia apareció apenas unas horas después de que trascendiera una nueva y dura denuncia judicial presentada por Mauro Icardi contra su exesposa y el propio Migueles.
La nueva denuncia de Mauro Icardi contra Wanda Nara
El periodista Gustavo Méndez fue quien hizo pública la nueva denuncia de Mauro contra Wanda a través de sus redes, mostrando el documento y escribiendo: “MAURO ICARDI FURIOSO Y AL HUESO: ‘LE RUEGO SEÑOR JUEZ (HAGOPIAN) QUE EXIJA QUE MI HIJA NO SEA TOCADA POR UN EXTRAÑO’”.
El escrito judicial, que involucra directamente a las hijas del futbolista con Wanda —Francesca e Isabella—, reavivó la disputa legal por la custodia y el bienestar de las niñas. Según Icardi, lleva más de cuatro meses sin verlas y considera que están viviendo “una vida impropia para ser niñas de 10 y 8 años”.
“Pasaron los meses y me vi OBLIGADO a volver a mis compromisos laborales, pero NO he abandonado la lucha por mis hijas y su bienestar. Francesca e Isabella actualmente se encuentran viviendo una VIDA IMPROPIA para ser niñas de 10 y 8 años. Viven expuestas a los medios, al hostigamiento de la gente en la calle, todo lo cual JAMÁS les ocurriría en Europa donde nacieron y se criaron como corresponde, propias de su edad”, manifestó el futbolista en el documento.
El jugador del Galatasaray explicó que, desde la distancia, continúa con una disputa judicial para lograr que sus hijas vuelvan a su “centro de vida”. Pero lo que más preocupó al deportista fue un video que, según él, muestra una situación que considera inaceptable.
“De lo que no cabe dudas, es que se trata de un vínculo reciente, otro ‘novio nuevo’ de la Sra. Nara S.S. y ya se encuentra en intimidad con mis hijas y, a la luz del propio video que difunde públicamente la madre, en absoluto estado de indefensión, porque mi hija fue ‘tocada’ o ‘acariciada’ por un extraño estando DORMIDA y ello es inadmisible”, expresó Icardi, visiblemente afectado.
En otro tramo del texto, el delantero apeló directamente al juez de familia, pidiendo una medida para evitar cualquier contacto físico entre sus hijas y personas ajenas al entorno familiar.
“Quiero ser claro, SS, yo no estoy diciendo que mi hija fue abusada. Le vengo a rogar que EXIJA que mi hija NO SEA TOCADA por un extraño. Fue Ud. en estas situaciones quien me restringió el contacto de mis hijas con mi pareja, quien hoy permite que ‘el nuevo novio de turno’ de la Sra. Nara TOQUE INDEBIDAMENTE a mi hija de 10 años, quien estando DORMIDA ni siquiera puede prestar su consentimiento o rechazo para recibir ‘caricias’”, concluyó Icardi.
El documento causó un gran impacto mediático y generó un nuevo enfrentamiento entre las partes. En ese contexto, la historia publicada por Wanda —con Martín Migueles en su casa y un corazón rojo— fue interpretada por muchos como una respuesta indirecta a la denuncia.
El presente de Wanda Nara
Mientras tanto, ni Wanda ni Migueles se pronunciaron públicamente sobre el tema. La empresaria, que se encuentra en Buenos Aires junto a sus hijos, evitó hacer comentarios sobre el conflicto judicial y continuó con su actividad habitual en redes.
Sin embargo, la foto alcanzó miles de reproducciones y comentarios en cuestión de minutos, reavivando la atención sobre su vida privada. El conflicto entre Wanda Nara y Mauro Icardi parece lejos de llegar a su fin.
A las batallas legales por la tenencia de las hijas se suman ahora denuncias cruzadas, interpretaciones mediáticas y publicaciones que mantienen viva la tensión. Y, una vez más, una simple historia de Instagram volvió a poner a la empresaria en el centro de la escena.
