En una jornada donde priorizaron el amor familiar, Wanda Nara vivió un Día de la Madre muy especial, completamente alejado del escándalo mediático. En lugar de una celebración ostentosa en público, la empresaria organizó un almuerzo íntimo en su propia casa. Su hermana, Zaira Nara, fue una de las protagonistas del festejo, compartiendo postales del día donde se las vio felices junto a sus seres queridos.
El encuentro reunió a su círculo más cercano, incluyendo a sus hijos, sus sobrinos, su madre Nora Colosimo, su padre Andrés Nara y su pareja actual, Martín Migueles.
La buena cocina se hizo sentir y el espíritu de pertenencia italiana heredado de la familia. Para asegurar la excelencia culinaria, Wanda convocó a uno de los chefs más prestigiosos del país y ahora su gran amigo, Donato De Santis. El cocinero que también es compañero de pantalla de Wanda en MasterChef Celebrity, fue el encargado de diseñar un menú con un marcado ADN italiano. Según las imágenes que compartieron en redes sociales, el lema elegido para la jornada encapsuló el espíritu de la reunión: “Mamma mia che pasta! Pasta & emozione & amore”.
El reconocido chef ofreció un menú de tres pasos, compuesto por antipasti, diversas pastas con salsas, y como postre, tronchetto de brownie. El momento estelar de la jornada, que tanto Wanda como Zaira mostraron en sus historias de Instagram, fue cuando Donato sirvió espaguetis calientes directamente sobre una inmensa rueda de queso parmesano (pasta alla ruota), una técnica típica de los mejores restaurantes italianos. Los hijos de las hermanas observaron con fascinación el proceso y las innovadoras técnicas del chef.
Decoración personalizada al mejor estilo italiano
La ambientación de la mesa también estuvo a la altura de la propuesta, con detalles que buscaban transportar a Italia. La mesa fue dispuesta con individuales de fibras naturales, platos en tonos tierra y servilletas a cuadros rojos y blancos, cada una personalizada con el nombre de los invitados. Sobre las servilletas, se colocó un tomate fresco desde su rama en homenaje al producto estrella del menú. El centro de mesa complementó el estilo italiano con flores rojas, tarros de pasta seca y latas de tomate decorativas.
Los gestos de afecto para Wanda Nara comenzaron temprano. La presentadora fue despertada a primera hora por sus hijas menores y su pareja, Martín Migueles, con un desayuno en la cama, que incluía una torta roja con la palabra “mamá”, un ramo de flores y una caja de sorpresas.
De esta manera, Wanda vivió un Día de la Madre diferente, un domingo de reencuentro que sirvió como excusa para rodearse de sus afectos más íntimos y reafirmar la importancia de la mesa familiar compartida.
Más fotos del especial domingo de las hermana Nara:
