El mal momento económico tiene uno de sus principales impactos en el sector industrial, que, más allá de cierres y de bajas en las ventas, tienen menor producción. Esta semana, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que el uso de capacidad instalada industrial fue de solo 59,4 por ciento en agosto.
El dato, si bien refleja el mal presente del sector, es el más alto en lo que va del año. El piso del 2025 se registró en marzo, con una capacidad instalada de solo 54,4 por ciento, mientras que el anual fue en marzo del 2024, con 53,2. A su vez, el índice más alto de los últimos doce meses se observó en octubre del año pasado, con un 63 por ciento.
Con respecto a los rubros, el uso de movilidad más bajo fue en Productos textiles, con un 41,5 por ciento; seguido por Productos de caucho y plástico, con 42,1; Metalmecánica excepto automotores, con 44,4; y Productos del tabaco, con 46,9. En contrapartida, los datos más altos fueron en Refinación del petróleo, con 86,1 por ciento; e Industrias metálicas, con 70,4.
Los números en La Matanza
El mes pasado, la Secretaría de Producción de La Matanza presentó la Encuesta Municipal de Actividad Industrial, que compara el segundo trimestre del año con el mismo período del 2023. El resultado fue negativo, ya que el 28 por ciento de las industrias locales tuvo una caída en su actividad, siendo el Calzado el rubro más perjudicado, con solo 39 por ciento.
Pero lo más preocupante del informe es que, en el mismo lapso de tiempo, el 41 por ciento de las empresas matanceras despidió empleados, mientras que un 55 mantuvo su plantilla, y solo un cuatro la aumentó. Así, por cada lugar que contrató un trabajador, en contrapartida, hubo otros diez que despidieron.





