El Ayuntamiento de Barcelona adecentará los entornos de una de las obras más desconocidas de Antoni Gaudí. Se trata del viaducto de Bellesguard, situado frente a la torre de Bellesguard, en el barrio de Sant Gervasi- La Bonanova. Esta singular estructura, formada por diez columnas inclinadas, está debajo de la calzada de la calle Bellesguard, una ubicación que la hace pasar desapercibida para muchos ciudadanos, incluso para los visitantes de la torre. La discreta señal en un extremo de la calle Valeta d’Arquer al parecer se antoja insuficiente.
Los responsables municipales son conscientes de que el entorno de este monumento no se encuentra en óptimo estado de conversación y al estar escondido puede facilitar actos de vandalismo y la estancia de personas sin hogar. Por ello, el Consistorio ha licitado las obras para renovar los alrededores del viaducto a fin de contribuir a la “mejora de la imagen turística” de la ciudad, “aumentar la seguridad” de la zona y “dignificar” este espacio.

El proyecto municipal contempla adecentar los entornos del monumento
Nacho Vera / Propias
El proyecto contempla un presupuesto de unos 29.000 euros y se financiará con la tasa turística. Se prevé que las obras empiecen a principios de noviembre y estén acabadas a finales de año. La superficie de actuación abarca 677,21 metros cuadrados y con las obras se renovará el pavimento, actualmente en mal estado con algunas grietas y tapas de arquetas enterradas.También se intervendrá en el suelo de arena del interior del viaducto, donde hay algunos baches. Por otro lado, se mejorará la accesibilidad con la instalación de una barandilla en la escalera para facilitar la llegada hasta el monumento.
Según recoge el proyecto, no se contempla una intervención en el monumento, en buen estado de conservación y restaurado en 2006 mediante una rehabilitación promovida por el Institut Municipal del Paisatge Urbà.

Interior del viaducto
Nacho Vera / Propias
La futura actuación tampoco está relacionada con el año Gaudí que se celebrará el próximo año con motivo del centenario de la muerte del arquitecto, informan fuentes municipales. Además del año Gaudí, Barcelona tendrá un 2026 intenso desde el punto de vista arquitectónico al ser sede de la capital mundial de la arquitectura, desde el próximo 12 de febrero, día de Santa Eulàlia, hasta el 13 de diciembre, día de Santa Llúcia.
El viaducto se enmarca dentro de la restauración de la torre Bellesguard realizada por Gaudí entre 1900 y 1909. Esta casa, declarada bien cultural de interés nacional, fue un encargo de Maria Sagués, la viuda del empresario de Jaume Figueras, a Gaudí quién ideó esta edificación como residencia de veraneo con aires de castillo medieval sobre los restos del antiguo palacio del rey Martí l’Humà, donde pasó los últimos años de su vida, entre 1408 y 1410.
De hecho, una intervención arqueológica a raíz de una obras en el recinto de la Universitat Abat Oliba sacó a la luz hace un par de años vestigios de la época medieval vinculados al antiguo palacio, lugar donde el monarca emitió actos de gobierno y contrajo matrimonio con Margarita de Prades, en una ceremonia oficiada por Benedicto XIII, papa Luna.

La actuación permitirá renovar el pavimento que rodea el monumento
Nacho Vera / Propias
Tal como explicó el periodista y cronista de la ciudad Lluís Permanyer en un artículo en La Vanguardia en la sección Àlbum, el palacio estaba rodeado por torres defensivas y disponía de un gran patio, huerto, terraza, capilla, sala de armas, la cárcel, capilla, reloj y dos galerías con veinticuatro ventanas desde donde se veía Barcelona y el mar.
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El arquitecto diseñó el viaducto para conservar los fragmentos de las dos torres medievales. Para ello, desvió el camino que cruzaba la finca que iba del antiguo pueblo de Sant Gervasi de Cassoles al cementerio, hoy en día localizado sobre la Ronda de Dalt. El nuevo tramo lo hizo pasar sobre la antigua riera de Betlem, procedente de la sierra de Collserola. Esta obra de ingeniería civil destaca por sus arcos parabólicos inspirados en la naturaleza e integrados en el paisaje, muy similares a los que Gaudí proyectó en el Park Güell.