Las redes de comercio previamente establecidas entre Estados Unidos y los países latinoamericanos contribuyeron a mitigar los efectos negativos.
-
Europa podría reimponer aranceles en casos puntuales tras la firma del acuerdo Mercosur-UE
-
Lula da Silva y Donald Trump retoman la buena sintonía y negocian una rebaja de aranceles

Los aranceles de Donald Trump impactaron menos de lo previsto en América Latina, según el CAF.
El impacto de los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la mayor parte de sus socios comerciales «ha sido menor de lo esperado» en la región latinoamericana, según el presidente del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), Sergio Díaz-Granados.
La implementación y entrada en vigor de los aranceles «recíprocos» de Trump fue el tema central de buena parte del año, sobre todo por los efectos que se proyectaban sobre la economía mundial: mientras que para el presidente estadounidense se trató de equilibrio ante lo que considera como prácticas comerciales injustas contra su país, la comunidad internacional alertó sobre una posible desaceleración del comercio global por el aumento de los costos de las exportaciones hacia Estados Unidos.
En América Latina, el escenario no se preveía muy diferente, pese a que buena parte de los países que integran la región obtuvieron los menores gravámenes, con una tasa del 10% —con conocidas excepciones, como el caso de México. Sin embargo, «cuando uno ya mira el año corrido desde enero a hoy, el impacto ha sido menor de lo esperado», afirmó Díaz-Granados en una entrevista con la AFP.
«Obviamente, al principio generó mucha turbulencia, pero el panorama se va despejando cada vez más», sostuvo.
Entre relaciones comerciales establecidas y buenos acuerdos posteriores
Según explicó el presidente del CAF, el menor impacto arancelario se debió a que «las redes de comercio» entre Estados Unidos y América Latina ya «estaban muy establecidas», lo que facilitó la adaptación a los nuevos aranceles.
«Hay unas ventajas comparativas que tiene América Latina sobre el mercado americano: su proximidad y una serie de vínculos muy profundos que van desde la presencia misma de hispanos y latinos dentro de Estados Unidos hasta la vinculación de las empresas americanas como inversionistas» en la región, consideró Díaz-Granados.
Además, agregó que la región logró suavizar el impacto tarifario gracias a las negociaciones de varios países con la administración Trump, después de que Washington anunciara el aumento de los gravámenes a las importaciones. «El panorama se ve más claro ahora con estos nuevos arreglos comerciales donde con seguridad habrá algo de aranceles, pero al mismo tiempo habrá algo de compensación en las cadenas y eso permitirá nuevamente un reacomodo», afirmó.





