Girona
El Gran Recapte, la campaña solidaria que hace 17 años abanderaron los bancos de los alimentos de Catalunya, en plena crisis económica, a fin de que familias en situación de pobreza pudieran acceder a productos de primera necesidad, ha cerrado la edición de este año con un “ligero descenso” de las aportaciones ciudadanas respecto del año pasado. No obstante, pocas horas antes de finalizar la recogida, se había superado la no despreciable cifra de un millón de kilos de alimentos donados, alrededor de mil toneladas, en toda Catalunya.
Los cerca de 16.000 voluntarios que se han repartido entre el viernes y ayer por los más de 2.000 puntos de recogida de alimentos de toda Catalunya, entre mercados y supermercados, intentando arrancar gestos de solidaridad de los clientes, en forma de donaciones de productos de primera necesidad (leche, aceite conservas, arroz…) han recogido menos kilos que en el 2024, cuando se superaron las 1.500 toneladas.
Las aportaciones económicas se pueden hacer vía web o Bizum hasta el próximo 23 de noviembre
En las últimas horas del día de ayer, cuando todavía no habían cerrado los comercios, el presidente del Banc dels Aliments de Barcelona, Lluís Fatjó-Vilas, anticipaba que la cifra final estaría “un poco por debajo” de la del año pasado con respecto a las donaciones físicas de productos de primera necesidad. En esta demarcación se alcanzaron entonces las 1.300 toneladas de alimentos.
Un descenso que atribuía a varios factores: por una parte al efecto de la dana en València, que originó entonces una gran reacción solidaria. Otro factor podría ser el cambio de fechas. Este año el Gran Recapte se ha adelantado tres semanas. “No acercarse a las fechas navideñas tiene un efecto que podría haber sido negativo, pero todavía se demasiado pronto para pronunciarnos definitivamente”, ha reconocido.
Han colaborado en la campaña unos 2.000 supermercados y cerca de 16.000 voluntarios, unos tres mil más que hace un año
El descenso, sin embargo, no ha sido generalizado. A falta de cifras definitivas, Girona habría sido la única de las provincias catalanas en que se habrían superado los registros de hace un año, según Fatjó-Vilas. En esta demarcación participaban 347 establecimientos y 1.780 voluntarios con el objetivo de superar los cerca de 160.000 kilos recolectados.
Sea como sea, los responsables de los Bancos de Alimentos animaban ayer a seguir haciendo aportaciones económicas, a través de la página web www.granrecapte.org y del Bizum 33596. El año pasado las donaciones económicas llegaron a los 1,2 millones de euros, dinero con el que se compraron otros productos de alto valor nutritivo como pescado, carne y huevos. Todo sirvió para atender a más de 230.000 personas en toda Catalunya.
Nuestro objetivo como Banc dels Aliments es poder entregar productos de forma regular cada mes
Lluís Fatjó-VilasPresidente del Banc dels Aliments de Barcelonma
Habitualmente, la campaña sirve para cubrir dos meses de ayuda solidaria. Fatjó-Vilas considera que las aportaciones económicas, abiertas hasta el próximo 23 de noviembre, pueden ayudar “a compensar” a la caída de donaciones de alimentos. “Nuestro objetivo es poder entregar de forma regular cada mes”, explica y se ha mostrado satisfecho de la alta participación de voluntarios en la edición de este año, unos 3.000 más que hace un año.
En la demarcación de Barcelona, los alimentos se trasladan a una nave situada en el puerto, donde unas 2.800 personas voluntarias clasificarán los alimentos en los próximos días y posteriormente se distribuirán a las entidades sociales colaboradoras que atienden a personas en situación de pobreza.





