El hecho ocurrió esta madrugada en las inmediaciones del boliche Club 23, sobre la Ruta 22 y 151. Tras recibir pedradas, los efectivos iniciaron una persecución hacia Neuquén, pero uno de los móviles perdió el control y chocó una columna. Los policías fueron hospitalizados y se encuentran fuera de peligro.
Un violento episodio tuvo lugar esta madrugada, alrededor de las 4:20, en las inmediaciones del boliche bailable Club 23, ubicado en la intersección de las rutas 22 y 151, en Cipolletti.
Según informaron fuentes policiales, personal de la Unidad 4ª acudió al lugar tras ser alertado por disturbios en la parte externa del local nocturno. Al llegar, el móvil recibió pedradas en el parabrisas por parte de un grupo de jóvenes, quienes luego escaparon a bordo de un automóvil en dirección a Neuquén.
Ante el ataque, los efectivos iniciaron una persecución por la ruta, a la que se sumó otro patrullero. Sin embargo, al llegar al ingreso a la ciudad de Neuquén, uno de los móviles perdió el control y chocó contra una columna de alumbrado público, lo que permitió que el vehículo de los agresores se diera a la fuga.
Los dos policías que viajaban en el patrullero accidentado fueron trasladados al hospital de Cipolletti y luego derivados a un centro de salud privado. “No tienen riesgo de vida y actualmente cuentan con alta ambulatoria, con nuevos exámenes previstos para el lunes”, indicaron desde la Unidad 4ª.
La investigación continúa para identificar a los agresores y determinar las circunstancias del ataque.





