Argentina, entre los países con más juicios laborales: preocupación en medio del debate por la reforma
Un estudio señala que Argentina lidera la litigiosidad laboral y alerta que el sistema de ART podría colapsar por fallos judiciales sin control
11/11/2025 – 13:58hs
Mientras avanza la discusión por la reforma laboral y se buscan estrategias para reducir la informalidad, un estudio volvió a encender alarmas: la Argentina figura entre las naciones con más juicios por accidentes laborales del mundo.
El dato surge de un informe de la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART), que señaló que el sistema atraviesa un desgaste crítico debido a la intervención de los peritos judiciales.
Mara Bettiol, presidenta de la entidad, aseveró que «las pericias judiciales, en franco incumplimiento a la Ley 27.348 y sus 18 adhesiones provinciales, está haciendo colapsar al sistema de ART y atenta contra la generación de empleo formal en el país».
Pericias en la mira: honorarios atados al fallo
De acuerdo con la UIART, el problema principal está en el modo de actuación de los peritos designados por la Justicia laboral. Bettiol afirmó que estos profesionales determinan el porcentaje de incapacidad y que «actúan sin control y sus honorarios están ligados, directa o indirectamente, al resultado del juicio«.
Así las cosas, nueve de cada diez juicios ingresan sin demostrar incapacidad o incluso sin relación con el trabajo, de acuerdo con estadísticas de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo.
El informe detalla que estos dictámenes «son luego avalados por los jueces laborales en sus sentencias en la casi totalidad de los casos aplicando, además, sobre los montos indemnizatorios resultantes de actualizaciones y tasas de interés imposibles de ser financiadas».
Juicios en ascenso a pesar de menos accidentes
Lo que más preocupa a las aseguradoras es que la litigiosidad crece aun cuando los accidentes disminuyen.
- Accidentes laborales: –55%
- Muertes en el trabajo: –80%
- Proyección para 2025: más de 130.000 juicios
El documento enfatiza el contraste: la tasa de judicialidad es 15 veces mayor que la de España y 21 veces más alta que la de Chile. «Si Argentina tuviera el índice judicial de España, tendría algo más de 8000 juicios por año y si tuviera el índice de Chile no alcanzaría a 6000 juicios por año«, destacó la UART.
Lumbalgia: la patología estrella en los tribunales
Otro dato llamativo proviene de un estudio del IERAL de Fundación Mediterránea. Allí se comprobó que la lumbalgia es una de las afecciones más presentadas en juicios laborales.
Mientras las Comisiones Médicas suelen clasificarla sin incapacidad, los peritos judiciales la asignan, en promedio, con un 14% de incapacidad definitiva, con grandes diferencias entre provincias y hasta dentro de una misma jurisdicción.
Reclamo por cambios en la Justicia laboral
Bettiol insistió en que es urgente ordenar el sistema pericial y aplicar plenamente la ley vigente: «Es imperativo resolver los desvíos judiciales y la actividad pericial para brindar un real servicio de justicia a empleadores y trabajadores…».
Y agregó: «La justicia laboral no puede seguir en manos de peritos cuya designación pasa por anotarse en una lista y salir sorteados, y que realizan pericias que nadie controla».
Reforma en agenda: expectativas del Gobierno
El Poder Ejecutivo anticipó que promoverá una reforma laboral orientada al empleo formal, tal como se establece en el Pacto de Mayo. Para la titular de la UART, el sistema de ART ofrece un antecedente clave: no alcanza con modificar leyes, sino que hay que garantizar su cumplimiento en la práctica.
En 2017, la Ley 27.348 redujo temporalmente los juicios al fortalecer la instancia administrativa y brindar patrocinio gratuito al trabajador. Sin embargo, el efecto duró poco y las demandas volvieron a crecer.
El informe concluye: «Para impulsar la formalización del empleo, la reforma laboral debe incluir medidas que terminen con el flagelo de juicios por riesgos del trabajo. A la vez, todos aquellos que tengan un rol en esta iniciativa deben tomar nota de nuestra mala experiencia: una buena ley, sin implementación adecuada en la justicia, agrava el problema».





