La tranquilidad de Acassuso se vio alterada este miércoles al mediodía cuando en la casa que Valeria Mazza y Alejandro Gravier tienen desde hace 27 años se registró un intento de robo que, por muy poco, no pasó a mayores.
Vale aclarar que la famosa pareja está de viaje en Europa, pero al momento del hecho, en el interior de la vivienda estaba su hija Taína, una amiga y dos empleados domésticos que fueron quienes se encontraron frente a los intrusos.
Según reconstruyeron las fuentes del caso, todo comenzó cuando un grupo de jóvenes llegó a la propiedad y se hizo pasar por cortadores de pasto. El ardid les permitió merodear unos minutos sin llamar la atención. Apenas después, saltaron el portón de entrada y accedieron al parque interno. Allí agarraron una mochila y empezaron a moverse por el terreno con la intención de seguir avanzando.
En ese momento, Taína advirtió la presencia de los extraños dentro del predio. Al verlos, comenzó a gritar y a alertar al resto de las personas que estaba con ella.
Los gritos de la adolescente generaron confusión e hicieron que los sospechosos abandonaran su plan de inmediato. En la apurada retirada, dejaron tirada la mochila en la entrada de la vivienda. Ahora los investigadores trataban de establecer si llegaron a llevarse algo de lo que, en un primer momento, habían guardado en su interior.

Siempre de acuerdo a los investigadores, uno de los empleados llamó al 911. Minutos después, personal de la Comisaría 4ª de San Isidro, con jurisdicción en la zona, se presentó en la propiedad para tomar testimonios. El caso quedó en manos del fiscal adjunto Patricio Ferrari, que convocó a agentes de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro para profundizar las tareas.
Los pesquisas relevaron las cámaras de seguridad privadas y municipales. En varias de esas grabaciones se ve al grupo de ladrones caminando por las inmediaciones minutos antes del hecho.
Las primeras hipótesis señalan que los autores serían adolescentes que actuaron “al voleo”, aprovechando que la casa de una figura pública llama la atención. Aunque hasta el momento no hay detenidos, la investigación avanza sobre esas imágenes y los datos aportados por vecinos y testigos.
La palabra de Alejandro Gravier
Mientras todo eso ocurría en Buenos Aires, Alejandro Gravier seguía las novedades desde Europa, donde acompaña a Valeria en un compromiso laboral. En diálogo con Desayuno Americano (América TV), el empresario llevó calma y dio su propia lectura de lo sucedido.
“Está todo bien, gracias a Dios, porque en casa siempre hay alguien. Es verdad, escuchaba ahí que decían que en 2013 habían entrado, pues normalmente piensan que no hay nadie, pero siempre hay gente y siempre hay seguridad y cuando vieron gente salieron, se ve que se fueron”, contó este jueves a primera hora.
Luego sumó que, según la información que le había llegado, no se habían registrado faltantes: “Esta es la información que tengo. No sacaron nada, ni se llevaron nada, no entraron adentro de la casa y está todo bien. La verdad, a distancia te digo que ojalá sirva esto, por lo menos para unirnos entre todos y que estas cosas no solo nos pasen a nosotros, sino que no le pase a nadie porque todo el mundo al final, y en esto sí estamos de acuerdo todos, que sufrimos cada vez que pasen este tipo de situaciones y ojalá sirva”.
Consultado por Pamela David sobre si sentía que la inseguridad había aumentado, Gravier prefirió ser cauto. “No tengo tanta información como para dar una opinión. Lo que sí te puedo decir es que cuando pasan estas cosas todos pensamos igual. Entonces, ojalá sirva para que se puedan ir solucionando porque estas cosas no deberían pasar”, respondió.

El empresario también se refirió al estado anímico de Taína, después de que se dijera que ella había estado cara a cara con los intrusos. “Ella está bien… me parece que se exageró el tema. Ella está bien y la contuvimos… es una persona que es bastante sólida por lo que demuestra, pero había mucha gente en casa dentro, por eso es que se ve que no entraron”, explicó.
Y destacó la reacción de su hija: “Las cosas a veces nos pasan y uno tiene que reaccionar. Lo importante siempre es ver cómo reaccionás ante cualquier situación y ella reaccionó muy bien y está tranquila y está bien”.
Ante la pregunta de si sentía que la casa estaba “marcada”, Gravier fue claro: “No, no, no. Yo no creo que esté marcada… Creería que fue al voleo”, sostuvo. Y sobre la seguridad del barrio agregó:
“No tengo tanta información. Nosotros estamos mucho afuera y la verdad no tengo teléfono. Lo que sí puedo decir es que en este caso en particular tienen todas las cámaras por la información que recibí y tienen toda la información de los movimientos de esta gente”.
Por último, dejó un mensaje sobre el vínculo con su entorno y con San Isidro, el lugar donde formaron su familia: “Ojalá que esto sirva para unirnos y entender que la única forma de que las cosas salgan adelante es estar unidos. Yo no veo otra forma…”, reflexionó.
Y sobre Valeria añadió: “Esto nos pone en alerta, ella está bien también, justo ahora está en una reunión de producción porque ella está presentando el Bailando con las estrellas acá y estamos tranquilos porque están todos tranquilos allá en Buenos Aires, que es lo más importante. Lo más importante es transmitir tranquilidad”.
Gravier remarcó además que hace 27 años que viven en esa casa y que no tienen intenciones de irse, que aman su barrio, su ciudad y confian en que, con trabajo policial y organización vecinal, episodios como el de este miércoles no vuelvan a repetirse.


