Alejandro Cipolla reveló que Morena Rial atraviesa un cuadro de fuerte aislamiento dentro del penal. Sin teléfono, sin televisor y sin contacto con otros internos, la joven pasa largas horas inmóvil, lo que mantiene en alerta a su entorno mientras avanza el pedido de prisión domiciliaria.
Los días de Morena Rial en prisión continúan marcados por la incertidumbre judicial y un creciente deterioro emocional que preocupa a su entorno más cercano. A pesar de los avances en su solicitud de prisión domiciliaria, la hija de Jorge Rial permanece aislada, sin acceso a su teléfono celular y prácticamente sin estímulos, situación que, según su abogado Alejandro Cipolla, la tiene “absolutamente sola y deprimida”.
En DDM, el periodista Guido Zaffora adelantó que existe “información positiva para la prisión domiciliaria de Morena Rial”, vinculada a un documento y a las terapias realizadas en el penal, cuyos resultados fueron favorables. Luego, el propio Cipolla tomó la palabra y confirmó que la joven fue sometida a un examen psicológico para determinar si estaba en condiciones de ejercer la maternidad. El resultado fue positivo, lo que, según el abogado, elimina obstáculos para que pueda reencontrarse con su hijo. “Ahora ya no debería haber excusas para seguir dilatando el encuentro de una madre con su hijo”, afirmó.
Sin embargo, el cuadro que describió el letrado sobre la vida cotidiana de Morena dentro del penal es alarmante. Según explicó, la joven no tiene permitido usar su teléfono celular, pese a que —asegura— otros internos sí cuentan con acceso. “Estoy teniendo un problemón grave porque no le dejan tener el celular. Yo dejé una denuncia porque se lo daban solo tres horas”, señaló. La situación se agravó cuando Morena perdió el aparato por un error propio, quedando completamente incomunicada.
Cipolla contó que la visitó el fin de semana y que encontró a su defendida en un estado de profundo abatimiento. “Está como depresiva. Está absolutamente sola: no tiene tele, no tiene nada. Cuando se queda sin teléfono, lo único que hace es mirar la pared”, relató, evidenciando la soledad extrema en la que transita sus días. Mariana Fabbiani intervino en el debate y señaló que, a diferencia de otros internos, Morena no convive ni interactúa con otros presos, lo que agrava aún más su aislamiento.
Mientras tanto, continúa vigente la discusión legal sobre el derecho de las madres con hijos menores de cinco años a cumplir la pena junto a ellos, un punto que el abogado volvió a remarcar. “La ley es muy clara: las madres con hijos menores de cinco años tienen que estar juntos”, insistió.
La situación judicial de Morena y su frágil estado emocional mantienen en alerta a su defensa, que insiste en acelerar los tiempos para lograr el arresto domiciliario.



