Argentina celebra un logro histórico en el ámbito de la salud pública: la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) ha dado luz verde a la comercialización y distribución de una vacuna nacional de dosis única contra el dengue. Este hito, desarrollado íntegramente por investigadores del CONICET y la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), posiciona a nuestro país a la vanguardia mundial en la lucha contra una de las enfermedades más desafiantes de la región.
La noticia, que resuena con particular fuerza en un contexto global de creciente preocupación por el dengue, representa un paso trascendental para la salud de millones de personas y un orgullo para la ciencia argentina.
Un Esfuerzo de Investigación y Desarrollo de Años
El proyecto, que ha requerido años de investigación, inversión y dedicación, fue liderado por un equipo multidisciplinario de virólogos, inmunólogos y biotecnólogos. La clave del éxito radica en su innovadora formulación, que permite una respuesta inmunológica robusta y duradera con una sola aplicación, simplificando drásticamente los esquemas de vacunación y facilitando su implementación a gran escala.
«Estamos frente a un cambio de paradigma en la prevención del dengue», afirmó la Dra. Laura Giménez, jefa del equipo de investigación, en diálogo exclusivo con Vive. «La monodosis no solo simplifica la logística, sino que también garantiza una mayor adherencia a la vacunación, algo fundamental para lograr la inmunidad de rebaño y proteger a nuestras comunidades».
Impacto Regional y Proyección Global
La aprobación de esta vacuna nacional tiene implicancias que trascienden las fronteras argentinas. Con el dengue siendo una epidemia que afecta a gran parte de América Latina, la solución monodosis desarrollada en el país se presenta como una esperanza concreta para toda la región.
Fuentes del Ministerio de Salud de la Nación adelantaron que ya se iniciaron conversaciones con organismos internacionales de salud y con países vecinos para explorar mecanismos de cooperación y garantizar que esta vacuna innovadora llegue a la mayor cantidad posible de personas en riesgo.
Este logro refuerza el valor de la inversión en ciencia y tecnología en Argentina y demuestra la capacidad de sus instituciones para generar soluciones de impacto global. Con una temporada de dengue que cada año representa un desafío mayor, la nueva vacuna nacional de dosis única emerge como una herramienta fundamental para proteger a la población y transformar el futuro de la salud pública.




