Noelia Marzol reveló en las últimas horas, a través de sus historias de Instagram, que su hijo mayor, Donatello —de cuatro años—, fue intervenido quirúrgicamente. En la publicación se la ve sobre una silla de ruedas -empujada por una enfermera del lugar-, con el pequeño en sus piernas: “Ayer se operó Dona. ¡Está súper genial! Se la re bancó” y añadió: “Ya estamos en casa jugando”. Si bien no dio detalles sobre el tipo de operación, buscó transmitir tranquilidad a sus más de dos millones y medio de seguidores.
La madre de Donatello y su hermana pequeña, Alfonsina, retomaron su rutina desde casa. En sus stories también compartió un momento divertido: sus hijos organizando una travesura y riendo en la bañadera, siempre con la complicidad de sus padres en cada juego y momento divertido en la casa. Ese espíritu despreocupado y familiar caracteriza la crianza que comparte con su esposo, el ex futbolista Ramiro Arias.
Lejos de ralentizar su ritmo, Noelia está atravesando una etapa laboral intensa y satisfactoria. Es madre de dos y, según declaró, la maternidad le brindó una felicidad sin precedentes. Además, realizó su debut como productora con “Bloody Tango”, un espectáculo de tango que ella lidera desde el escenario, con funciones en el Teatro Astral. Paralelamente, protagonizó “Un viaje en el tiempo” junto a grandes figuras como Pedro Alfonso y Paula Chaves, en una comedia familiar que recorre la cartelera porteña.
Entre la familia y el trabajo
Marzol combina su rol de artista con el de mamá comprometida. En entrevistas, reconoció haber atravesado una “depresión preparto”, y define a Ramiro como su “cable a tierra”. Además, revela que incorporó la terapia a su bienestar personal desde los 15 años. En su día a día, alterna funciones de jueves a domingo con actividades en el campo, donde busca que sus hijos se formen en contacto con la naturaleza y los animales, recordando su propia crianza.
Hace pocos meses, la familia se mudó a una casa amplia y luminosa, pensada para disfrutar del aire libre. La propiedad cuenta con un gran parque, pileta y espacios diseñados para que los chicos jueguen sin límites. Noelia compartió imágenes del jardín y de la decoración interior, donde predominan los tonos claros y detalles modernos que reflejan su estilo personal. “Queríamos un lugar donde los chicos puedan correr y estar en contacto con la naturaleza”, comentó en una entrevista reciente.
La mudanza significó un cambio importante en la dinámica familiar. Ahora, las tardes se llenan de juegos en el césped y reuniones con amigos en la galería. Noelia asegura que este nuevo espacio le permite equilibrar mejor su vida profesional con la maternidad: “Es nuestro refugio, donde todo cobra sentido”, expresó. La casa se convirtió en el escenario perfecto para los momentos más felices, y también para atravesar con calma situaciones como la recuperación de Donatello.
