La planta tendrá una capacidad de producción de 200.000 m³ diarios, y estará conectada a la infraestructura existente en Aguas Corrientes.
Foto: Ignacio Sánchez.
Redacción El País
El directorio de OSE aprobó este viernes el plan de obras para la construcción de una nueva planta potabilizadora que estará ubicada sobre la cuenca del río Santa Lucía, con una capacidad de producción de 200.000 m³ diarios, conectada a la infraestructura existente en Aguas Corrientes (Canelones).
A favor del plan de obras votaron el presidente de OSE, Pablo Ferreri, y el vicepresidente, Guillermo Caraballo. En contra, lo hizo el director en representación de la oposición, José Amy, informó Subrayado (Canal 10) y confirmaron a El País desde el ente público. De esta manera, el proyecto pasó a la órbita de Presidencia de República y luego irá al Tribunal de Cuentas (TCR) para su consideración.
El pasado 18 de julio el gobierno anunció la decisión de realizar «importantes obras que aseguran el abastecimiento de agua potable para el área metropolitana» y no el Proyecto Neptuno-Arazatí.
Además, de esta obra en la cuenca del Santa Lucía se prevé la construcción de una represa en el arroyo Solís Chico, que aportará una reserva de agua bruta de 6 millones de m³ y una planta potabilizadora de pequeño porte con capacidad de 24.000 m³ diarios, destinada a asegurar el abastecimiento en la Costa de Oro, desde el arroyo Pando hasta Jaureguiberry.
Foto Archivo El País.
Cruces políticos por cancelar proyecto Neptuno
La decisión del gobierno de cancelar el proyecto Neptuno -una planta potabilizadora de agua en Arazatí, junto a otras obras, que se acordó en la administración de Luis Lacalle Pou– y realizar otras inversiones con el objetivo de mejorar el abastecimiento de agua potable a la zona metropolitana derivó en una maratónica interpelación de la oposición a las autoridades del Ministerio de Ambiente y OSE en el mes de agosto.
Los blancos —en particular el exministro Martín Lema— cuestionaron las «contradicciones políticas, técnicas y legales» en que a su parecer ha incurrido el ministro de Ambiente Edgardo Ortuño al defender la necesidad de construcción de la represa en Casupá, como parte de una inversión integral que busca mejorar el suministro de agua potable a la zona metropolitana, y que incluye la construcción de una nueva planta de agua potabilizadora cerca de donde ya funciona la de Aguas Corrientes, en sustitución de la potabilizadora que el gobierno de Luis Lacalle Pou buscaba contruir en Arazatí, San José.
Foto: Leonardo Mainé.
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