Así lo indicaron hoy las últimas estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que muestran que la región continúa avanzando por un camino de crecimiento moderado en un entorno internacional aún incierto.
Conforme el organismo de la ONU, la tasa de crecimiento se mantiene ligeramente por encima del 2,3% registrado en 2024 y no muestra indicios de una reversión de la desaceleración iniciada tras la recuperación pospandemia. Tras expandirse un 6,9% en 2021, el crecimiento se desaceleró al 3,7% en 2022 y al 2,3% en 2023, nivel que la CEPAL también prevé para 2026.
A nivel nacional, Venezuela lidera las previsiones de crecimiento para 2025 con un aumento del 6,5%, seguida de Paraguay (+5,5%), Argentina (+4,3%) y Costa Rica (+4%). En el rango medio se encuentran Guatemala (+3,9%), Honduras y Panamá (+3,8%), El Salvador y Nicaragua (+3,5%), así como Perú y Ecuador (+3,2%).
Se espera un crecimiento más moderado, pero aún positivo, para República Dominicana (+2,9%), Colombia (+2,6%), Chile y Brasil (+2,5%) y Uruguay (+2,2%).
En el Caribe, excluyendo Guyana, que, gracias al auge petrolero, se espera que registre un aumento del 15,2%, el crecimiento promedio se estima en 1,9%. Las únicas economías que se prevé que se contraigan son Cuba (-1,5%) y Haití (-2,3%).
(ANSA).

